“Ni loca hubiese llegado hasta donde llegué si no hubiera hecho de hombre tantos años,
hay un montón de oportunidades que se me dieron porque era más fácil para la persona que yo era”
a los usuarios, Workana se hizo muy conocida entre los freelancers rápido, creció muy rápido también en ese mundo y hoy es referente. Con el aumento del acceso a Internet y surgimiento de mejores herramientas para trabajar colaborativamente, se fue haciendo más fácil y un modelo de vida más accesible”, relata Bracciaforte.
Mientras la tendencia crecía año a año se sumó un evento imprevisto que funcionó como catalizador, una pandemia que obligó a todo el planeta a “quedarse en casa” y a las empresas y organismos a forzar el trabajo remoto. En abril de 2020, Workana pasó de su promedio mensual de registrados de entre 40.000 y 50.000 a 100.000 y 120.000. A partir de octubre de 2020, esa cifra pasó a entre 80.000 y 100.000 registrados mensuales y nunca más bajó.
“Cuando llegó la pandemia lo que pasó es que las herramientas estaban todas, la conectividad en los países más avanzados y las grandes urbes es buena, entonces lo que faltaba era que las empresas se adaptaran. El shock vino por otro lado, y fue más un problema de estilos de trabajo lo que se evidenció con la pandemia”, explica Bracciaforte. “Esto ya lo veníamos trabajando justo el año anterior a la pandemia, en 2019, y es de lo que más hablamos últimamente: trabajo asincrónico, cómo trabajar mejor cuando estás remoto, no tener tantas reuniones que pueden ser mails. Esas situaciones surgieron y las empresas se quedaron tratando de entender y después vino el efecto pospandémico, con la vuelta a la presencialidad y es que las personas no quieren volver atrás, están peleando por el trabajo híbrido porque en muchos rubros confirmaron lo que ya sabían, que no hace falta estar 5 días a la semana en una oficina para ser productivo”, destaca.
¿Cuál crees que es el desafío más grande para las empresas con respecto a este tema?
Estamos trabajando en eso con varias empresas y creemos que tienen que entender que pueden ser más flexibles y adaptar sus estructuras de manera diferente. Por ejemplo, ampliar equipos temporalmente para un proyecto, que es en lo que trabajamos nosotros: se contratan, 10 o 15 desarrolladores, cuatro Project Managers por un año. Hay mucha gente que pospandemia no quiere ser freelance pero sí quiere trabajar remoto en proyectos de seis meses o un año, es una tendencia reciente que vemos.
Otro desafío que vemos para las empresas en cuanto a la contratación de ciertos puestos es que la competencia se multiplicó. Por ejemplo, yo me fui de Córdoba buscando oportunidades, hoy tenés unas diez empresas grandes, que no son muchas, y del rubro de consumo masivo serán cuatro. El tema es que entre estas cuatro ya no son competencia, ahora la gente puede buscar trabajo en otra empresa del rubro en otra parte del mundo y desde su casa. Y muchas no terminan de entender eso. Antes en Córdoba tenías bastante cautivo a cierto tipo de empleados y ahora no es tan así entonces cuando eso empiece a caer, va a estar difícil. ¿Cambiaron los rubros de las búsquedas en la plataforma a lo largo de estos 10 años?
Las macro categorías no cambiaron tanto: IT, diseño, marketing digital y administración y ventas siguen siendo las más fuertes desde que empezó la plataforma. Sí crecieron las que eran más chicas, antes IT y diseño eran súper fuertes y ahora marketing digital creció mucho y en la pandemia creció todo lo que es soporte administrativo porque ahora se pueden hacer esas tareas virtualmente y también roles específicos como desarrolladores de ventas, que ahora se puede hacer desde casa. Después dentro de las categorías cambió mucho, en 2012 hablábamos de diseñadores gráficos y diseño web responsive era lo más avanzado, ahora tenés a quienes reinan en la plataforma que son los diseñadores UX, UI, los más buscados. Después en cuanto a los desarrolladores van cambiando los lenguajes que se buscan, cada 2 o 3 años cambian una tecnología por otra pero sigue siendo un desarrollador lo que se busca.