Aprovechar los bordes para generar vida en el interior
Entre Palermo y Colegiales se desarrolla un edificio de usos mixtos con un gran corazón de manzana.
Entre el Palermo gastronómico, turístico y moderno y el Colegiales residencial, arbolado y familiar, va tomando forma un nuevo barrio en donde hasta hace muy poco se extendía un área no construida en el corazón mismo de Buenos Aires: Nuevo Colegiales. En el centro de ese área -un lote delimitado por las calles Concepción Arenal, Zapiola, Conesa y Santos Dumont- avanza Concepción, un proyecto que ofrecerá un nuevo modelo para la gestión del espacio que generará un fuerte impacto sobre la vida cotidiana y el paisaje urbano. Además, crea un nuevo vínculo barrial y un polo de urbanidad de alto dinamismo.
Frente al desafío de realizar un programa mixto en un predio de casi 13.000 m2, trabajamos desde las primeras líneas a partir de parámetros de dimensión y ubicación. No casualmente la implantación refuerza la tipología fundacional, permanente y universal de nuestra ciudad, la forma en que se refleja la particularidad porteña y su universalidad cosmopolita: la manzana de Buenos Aires, desde Borges, tan contemporánea como atemporal.
Nuestra decisión fue consolidar la manzana para construir un edificio perimetral de escala barrial, ampliando el espacio público exterior y transformando las veredas en un amplio y atractivo paseo. Allí donde el espacio público se dilata concentramos los accesos, materializando un corazón de manzana verde de uso intensivo. El resultado es la recreación de un área que en su conjunto resultó densificada a partir de un edificio con viviendas distribuidas en forma de anillo con vistas amplias en dirección de la ciudad y sobre el paisaje interior, que se completa con un parque elevado de contemplación y uso deportivo y cultural.
El edificio corona en una terraza verde sobre los dúplex, conformando un proyecto complejo pero con un lenguaje no estridente. Es una construcción tradicional con grandes superficies verdes y equipamientos con usos altamente diversificados, fuertemente reconocible y pivote de una nueva urbanización del área. El proyecto Concepción es una obra con una superficie total a construir de 81.521 m2. El proyecto se compone de dos subsuelos, un basamento comercial de doble altura y cinco pisos altos de viviendas y estudios que recorren la totalidad del perímetro y recuperan la altura barrial, y un edificio curvo de 15 pisos de viviendas y dúplex en su coronamiento.
Los subsuelos alojan un garaje comercial y cocheras exclusivas para los residentes. El basamento comercial, de 7 metros de altura, define la relación con el espacio público al que se ceden 800 m2 parquizados y equipados. El espacio se transformará seguramente en un polo gastronómico y de concurrencia masiva.
El basamento albergará el único y gran acceso al conjunto, ubicado en la plazoleta generada en la intersección de Concepción Arenal y Zapiola (que estará dominada espacial- mente por una escultura de gran porte). El acceso inicia compositivamente una diagonal que penetrará virtualmente en el edificio, organizando tanto parques como áreas construidas.
Por su parte, el edificio de mayor altura albergará un gran hall, de aproximadamente 1.000 m2, 130 metros de desarrollo y una altura máxima de 18 metros que albergará áreas de estar, biblioteca y lockers. Al cabo de su extensión se desarrollará un mural del artista plástico argentino Pablo Siquier.
La transparencia del hall permite ver el gran parque de planta baja de unos 3.000 m2 que contendrá una gran piscina de arena, piscina para niños y áreas íntimas de encuentro. El parque está rodeado por amplias veredas interiores equipadas, que distribuirán tanto a los núcleos de vivienda como al bar restó de la piscina, a los salones gourmet, al gran salón y al área de coworking. En el cuarto piso se ubican una sala para niños, un microcine y una sala de ensayo.
En el sexto piso y alrededor de un gran parque de 4.000 m2 se ubican los equipamientos deportivos más importantes: el gimnasio cubierto y su expansión, la piscina cubierta de 25 metros de largo, un área de hidromasajes y relax, una sala de pilates, un salón de yoga y el spa. Todos estos usos se despliegan alrededor del parque elevado que contiene un circuito aeróbico, un sector para calistenia, miradores urbanos, juegos para niños, cine a cielo abierto, senderos y una vegetación que acompaña la totalidad del desarrollo de este gran paseo perimetral que se ofrece como quinta fachada elevada a los residentes de los pisos altos.
Además de los estudios profesionales y los locales comerciales, el uso dominante es la vivienda a través de diversas tipologías que van desde estudiados ambientes únicos, departamentos en dúplex, unidades de características más familiares de dos y tres dormitorios y amplios penthouses con terrazas, piscinas y roof garden individuales.