Málaga se abre a las inversiones argentinas
De la mano de una desarrolladora local, es posible comprar un departamento en la ciudad española. Detalles del negocio.
Un argentino puede comprar un departamento en Málaga depositando pesos. Suena raro, pero factible. Así lo asegura Néstor Kreimer, titular de la desarrolladora Kuantica, quien lanzó “Onda Serrano” junto con el arquitecto Roy Nussbaum.
El emprendimiento está compuesto por 25 unidades destinadas a vivienda permanente en un terreno de casi 1.000 m2 a 15 minutos del centro histórico. La idea se fue gestando de a poco, y empezó con el “enamoramiento” que los impulsores del proyecto sintieron al conocer la ciudad. Nussbaum, quien en mayo se instalará allí con su familia, cuenta que “Málaga creció mucho durante este último tiempo gracias a un fuerte apoyo del gobierno. Esto hizo que para los vecinos sea demasiado caro vivir en el centro y se tengan que alejar un poco”. La demanda de vivienda permanente, más el crecimiento del turismo, alentó al arquitecto a concretar dos emprendimientos en esa ciudad: un hotel y un complejo de viviendas. Onda Serrano es su tercera experiencia.
Por su parte, Kreimer sostiene que el crecimiento de diferentes industrias posicionó a Málaga como un lugar en donde es posible emprender negocios sustentables. “Es una plaza que está en la picota de los inversores de países nórdicos, inclusive rusos e indios”, aclara. Y agrega: “Nos orientamos al malagueño que tiene un crédito bancario. Como desarrollador en Argentina yo no puedo decirle al inversor el número exacto de cuánto saldrá el negocio, en cambio en Málaga sí puedo decirlo, porque a la salida está el usuario final con un préstamo a 30 años”.
Según sus estimaciones, los inversores obtendrán una ganancia del 40% en euros “de punta a punta del negocio, entre un año de papeles y dos de obra”. Además del factor económico, el desarrollador destaca otra ventaja: “Los interlocutores somos argentinos, con caras visibles en el mercado. Pueden venir a nuestras oficinas y conocer nuestros antecedentes y cómo es el negocio. Tenemos todas las respuestas”.
Con un precio promedio de 2.600 euros por metro cuadrado (en España se calcula como en Uruguay, el metro construible más la incidencia de las áreas comunes), el emprendimiento se diferenciará por contar con espacios al aire libre y un original uso de la tecnología. Bajo el concepto “tu casa te cuida”, las unidades incluirán sensores biométricos que miden los parámetros de salud, entre otras propuestas disruptivas.
El edificio tendrá planta baja y dos pisos. “El más barato es el primero, porque en PB tenemos patios y eso muy valorado. Los malagueños adoran los áticos aterrazados, lo que para nosotros son balcones aterrazados, que también tendremos en los niveles superiores”. En cambio, manifiestan poco interés por amenities. “Con pileta y barbacoa (parrilla) están más que satisfechos, y nosotros a eso le vamos a agregar cocheras para autos eléctricos y hasta estamos evaluando poner jacuzzis en los pisos de arriba. Por la previsión que hicimos, con eso se podría defender el precio en 150 o 200 euros más por m2”.
El inversor puede ingresar al negocio con el 40 % al boleto (“contrato de venta”, en España) y el resto en 24 cuotas fijas en euros, sin interés. Kreimer aclara: “Se depositan pesos en una caja de ahorro local. Los pesos depositados en la caja de ahorro me aparecen a mí acreditados en euros. A lo largo de toda la inversión, en ningún momento será necesario comprar euros”.
Si el propietario lo requiere, Kuantica cuenta con una inmobiliaria que se ocupa de la administración del alquiler por una comisión del 10 por ciento. Kreimer explica las opciones que tiene el inversor: “El alquiler vacacional factura al año unos 18.500 euros en un departamento de 2 ambientes. Un alquiler convencional factura cerca de 9.600 euros. Pero entre lo que cobra el sitio que publica la unidad y la gestión para administrar alquileres vacacionales, que es del 25 %, la rentabilidad entre una modalidad y otra no es tan distinta”.
En cuanto a la cuestión legal, Kreimer asegura que “cualquiera puede ser propietario en España. Llegado el momento de la escritura, recién ahí hay que sacar el NIE (Número de Identificación de Extranjero). Vendría a ser un CUIT especial para los compradores no residentes. Además, existe la visa de residencia, que se obtiene cuando tenés inversiones por más de 500.000 euros, algo así como dos departamentos del precio promedio de Onda Serrano. Se hace un poder a través de un escribano en Argentina, se apostilla y nuestra gente en España tramita la residencia sin necesidad de ir al consulado”.
Por otra parte, en España no existen el impuesto a los bienes personales. En su lugar se cobra el IBI (impuesto a los bienes inmuebles) que ronda los 500 euros por año, según detalla Kreimer. “Si la propiedad se ofrece en alquiler, el 24% del valor de los alquileres es el impuesto que se cobra por esa ganancia. Si se destina a uso propio, del valor catastral que tenga el inmueble para el ayuntamiento de Málaga, éste considera al 2% de ese valor como la base imponible para renta presunta. De ahí se paga el 24% del 2%”.
Para concluir, Nussbaum resume otro atractivo del desarrollo: “En España el mercado es mucho más previsible. Los valores se mantienen y las reglas son más claras”. «