FRENTE A LOS PROBLEMAS, SOMOS VÍCTIMAS O CREATIVOS?

Es un método manual, preventivo y terapéutico integral, que intenta devolverle a la Columna Vertebral su alineación, flexibilidad y funcionalidad. Pero, sobre todo, intenta restituirle a las personas, un equilibrio que se perdió, y que se manifiesta mediante el dolor, rigidez, cambios en el humor, etc.

El origen se remonta a más de 6500 años en Oriente, precisamente en el Tibet. En aquellos tiempos solo recibían los beneficios de esta práctica reyes, zares, y en general la nobleza. En la Argentina, la historia comienza con un monje que llega a nuestro país, y enseña la técnica por primera vez. A partir de ahí, comienza la transmisión de los conocimientos a profesionales, como así también se le va dando un sustento teórico a esta práctica. Una particularidad es que la enseñanza de los conocimientos se sigue transmite de maestro a discípulo.

El fundamento de la Praxis Vertebral está dado por el concepto de que nuestra columna es nuestro eje postural y mecánico, pero también un eje neurológico y energético, del que parten todos los nervios que van a dar el movimiento y la sensibilidad a todo el cuerpo, y además las vías reflejas que mantienen el buen estado (trofismo), y funcionamiento de los tejidos y órganos.

¿EN QUÉ CONSISTE LA PRAXIS VERTEBRAL?

En cuanto a la técnica manual en sí, se realizan presiones suaves pero profundas, no agresivas, a lo largo de toda la columna, con el fin de devolverle la funcionalidad a la misma, descomprimiendo los espacios intervertebrales, y liberando los nervios, que al inflamarse dan lugar a distintos síntomas. A su vez, también se realizan maniobras que tienden a devolverle la funcionalidad a las articulaciones en general. Como así también, elongaciones neurales, etc. Veamos en una consulta. En primer lugar se realiza una evaluación, en la cuál, se recoge toda la información necesaria para armar un plan de tratamiento.

¿CUÁLES SON LOS CUADROS DE CONSULTAS MÁS FRECUENTES?

Los personas llegan a la consulta en busca de ayuda, por ejemplo: en busca de mejoras que no han encontrado con otras terapias, o personas con una carga de medicamentos muy importante que siguen sufriendo de dolores, o en muchas ocasiones como una alternativa para intentar evitar ciertos tipos de cirugías. Y lo bueno de esta generosa herramienta, es que en muchos casos, cuando están dado ciertos factores como que el proceso sea pasible de la terapia, el compromiso del paciente, correcta evaluación y ejecución del tratamiento, consejos y cuidados, podemos lograr evitar estas intervenciones, o lograr la mejoría que buscan las personas.

Entre los cuadros más frecuentes por los cuales, las personas acuden al profesional en busca de ayuda, se destacan: dolores en general de la columna vertebral y de articulaciones periféricas como por ejemplo: Dolores en hombros que impiden en algunos casos la posibilidad de realizar las tareas o deportes con total normalidad, como para nombrar a modo de ejemplo. Mayor es la dificultad, cuando la impotencia funcional

se traduce en no poder realizar las tareas laborales, como un pintor de obra tener que dejar de trabaja por un tiempo indeterminado.

Con la praxis, se consigue generalmente mayor flexibilidad articular, alivio del dolor, recuperación de la postura erecta e incremento de la tonicidad muscular.

¿QUÉ OTRAS AFECCIONES SON TRATADAS?

Imaginemos que en ocasiones no pueden acudir a fiestas o reuniones con sus zapatos, a causa de los dolores que no ceden, lo que termina repercutiendo en el plano social y afectivo de la persona. En el caso de los juanetes, para el tratamiento utilizamos un tape, que redistribuye la descarga de peso en el pie, logrando una mayor armonía entre los arcos del mismo, mejorando la alineación del hallux (dedo gordo del pie), y principalmente mejorando el dolor.

Un caso que recuerdo es el de una mujer embarazada, la cual manifiesta que se le adormece todo el miembro superior por las noches y pierde por momentos la fuerza y coordinación. A causa de esto no logra descansar, a su vez merman las energías para cuidar a su hijita de dos años, y realizar su actividad laboral!!! En este caso, una sesión de praxis vertebral en el cuello fueron suficientes para revertir la situación. ¿Conclusión? Cesan sus síntomas, está mejor y más feliz.

Otro caso frecuente, son los pacientes con dolores en sus rodillas, en algunos casos, llegan antes de tomar la decisión de una cirugía. En ocasiones, con la praxis las personas sienten como los dolores van mermando, como mejora la movilidad, y recuperan el equilibrio de tonicidad muscular y flexibilidad para poder caminar de manera fluida.

¿QUÉ TIPO DE CUIDADOS SE LE RECOMIENDAN AL PACIENTE, PARA QUE EL TRATAMIENTO DÉ RESULTADO?

Cabe destacar, que más allá de la praxis en sí, muchas veces los consejos y cuidados que se le indican al paciente, pueden ya ser una herramienta fundamental para que algunos síntomas no sigan agravando o que el tratamiento pueda dar los resultados deseados. Algunos ejemplos son: posición frente a la computadora, posición para dormir, la manera de

realizar algún esfuerzo o alguna tarea de lo cotidiano, descanso, etc.

Sólo como ejemplo podemos completar la lista nombrando: ciatalgia (ardor, quemazón, adormecimiento sobre el recorrido del nervio ciaático que suele llegar hasta el pie), mareos (las cosas se mueven), vértigo (es uno el que se mueve como sí fuera un barco), alteraciones posturales (esoliosis, dorso curvo), dolores por hernias de disco, parálisis obstétricas en niños, entre otros. Lo más desconocido, es el alcance que tiene en situaciones de procesos como nódulos mamarios benignos, trastornos urinarios como piluria (repetidas micciones), ronquidos, por solo citar algunos ejemplos. En estos casos, desde la praxis vertebral sostenemos que pueden ser el resultado de cambios funcionales provocados por un defectuoso funcionamiento de la columna vertebral.

¿CUÁNTAS SESIONES SON NECESARIAS PARA LOGRAR UN RESULTADO INTERESANTE?

Por lo general un proceso estándar por un cuadro de dolor, se estipula un total de 3 ó 4 sesiones, con una frecuencia de cada 3 ó 4 semanas entre cada consulta. En dicho período tendrían que aparecer mejorías que avalen el tipo de tratamiento. Pero siempre va a depender de cada caso en particular.

Cabe destacar, que la Praxis Vertebral, más allá de los resultados que la avalan, lejos de ser un procedimiento mecanicista, no trata enfermedades, por el contrario, es una noble herramienta que emplean profesionales con cualidades humanísticas, al servicio de las personas. Por lo tanto, es de vital importancia, el compromiso por las personas que acuden a nuestra consulta, el escucharlas, conocer sus vidas (actividad laboral, grupo familiar, gustos, etc). Aconsejamos a los pacientes, a que acudan a su médico para descartar causas que excedan nuestras competencias. En Argentina, la Praxis Vertebral crece a pasos agigantados, gracias al testimonio de las personas que acuden a nosotros, y son el fiel testigo de los resultados.

Cabe destacar, que la Praxis Vertebral, más allá de los resultados que la avalan, lejos de ser un procedimiento mecanicista, no trata enfermedades, por el contrario, es una noble herramienta que emplean profesionales con cualidades humanísticas, al servicio de las personas.