Beneficios de las legumbres para la salud
Favorecen la creación de energía constante que se gasta lentamente.
En la variedad está el gusto y la nutrición, también. En el Año Internacional de las Legumbres, la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN) promueve su consumo, compartiendo consejos para incorporarlas a la dieta cotidiana y capitalizar sus beneficios.
■ Las legumbres son buenas en sí mismas.
■ Saber cómo combinarlas para potenciar su valor nutritivo. Las legumbres son fuente de proteínas vegetales, pero carecen de algunos aminoácidos esenciales. Para lograr proteínas completas, se deben combinar con cereales: por ejemplo lentejas + arroz o garbanzos + maíz, etc.
■ Contienen hierro no hemínico (de origen vegetal), pero éste no se absorbe per se (de por sí). Acompañarlas siempre con alimentos ricos en Vitamina C como tomates, morrones o jugo de limón.
■ Aportan fibras fermentables y no fermentables, lo cual contribuye al buen tránsito intestinal y, a su vez, favorece una más lenta absorción de los
Hidratos de Carbono y su pasaje a la sangre.
■ Poseen Potasio, mineral que colabora con el correcto funcionamiento cardíaco y la contractilidad muscular, y, al ser ricas en Ácido Fólico, se vuelven un aliado clave durante el embarazo para el apropiado cierre del tubo neural del feto.
■ Al ser pobres en grasas y libres de colesterol, ayudan la prevención de enfermedades cardiovasculares, y como cuentan con bajo contenido de Sodio, pueden ser incluidas en la dieta de quienes padecen hipertensión arterial.
■ Ideales para pacientes celíacos por no tener gluten.
■ Brindan gran poder de saciedad, lo que las hace efectivas en planes de alimentación hipocalóricos (siempre controlando la cantidad a consumir y preparándolas preferentemente con vegetales).
■ Son muy versátiles y pueden realizarse con ellas distintas preparaciones como sopas, guisos, ensaladas, pastas para untar, etc.