TINTURAS MADRES
Las propiedades curativas de las plantas medicinales
a tierra es el misterioso laboratorio de la vida” citaba Manuel Lezaeta Acharán, naturista y escritor chileno, y vaya que certeza tenían sus palabras. Es sabido que existe un universo de plantas medicinales para tratar cualquier malestar o enfermedad, sea física o emocional. Comúnmente, tomamos las propiedades de las plantas a través de infusiones o cápsulas, sin embargo, existe un método más eficaz que puede aliviar nuestros síntomas a través de la extracción de las propiedades de las plantas; son las llamadas tinturas madres.
Cuanto más natural consumamos la planta medicinal escogida, mayor será el efecto en nuestro organismo. Las tinturas madres se obtienen después de dejar macerando las plantas, por un período, en alcohol y agua. Después de varios días de maceración, se cuela la mezcla y se obtiene la tintura con todo el principio activo de la planta, logrando un estado puro y de alta concentración de sus propiedades medicinales. Al extraerse de esta forma, la acción es más rápida y mucho más potente que beberlas en infusiones y otras preparaciones, por lo que se recomienda consumirlas diluyendo, por ejemplo, 1-2 cucharaditas en una taza y 3 tazas al día.
D.I.Y O HAZLO TU MISMO
¿Te imaginas que del huerto o jardín de tu casa puedas extraer la medicina para tus enfermedades y dolencias? El botiquín verde es cada vez una alternativa al alcance de todos, lo mismo pasa con las tinturas madres.
La preparación más simple para elaborar en casa es:
Utilizar las partes de la hierba que se desee. De preferencia secas.
Se llena una botella con alcohol, usando relación 1:3 (1 parte de hierbas secas y 3 partes de alcohol), ejemplo, 300 gr de flores de manzanilla en 1 litro de alcohol.
Se cierra bien la botella y se deja reposar por 3-4 semanas, en oscuridad, revolviendo semanalmente para ayudar a la maceración. Cumplido el periodo de macerado en alcohol, se filtra por medio de un papel filtro y se deja almacenado en una botella café o verde para que no se degraden componentes por efecto de la luz solar.
¡Y listo! Tienes tu tintura madre elabora en casa.
LA TINTURA SEGÚN LA ENFERMEDAD
Existen cuantas tinturas como plantas medicinales en el reino vegetal. Incluso, se elaboran preparados combinados para reforzar o potenciar las propiedades de unas con otras, con el fin de entregar un mejor resultado para el organismo.
Dentro de las más comunes, podemos mencionar las siguientes tinturas madres:
Cola de caballo: para la retención de líquidos y reducir volumen corporal. Cardo mariano: recupera el hígado y depura el organismo después de excesos o tratamientos agresivos Hinojo: para mejorar la digestión y aliviar o prevenir los gases Alcachofa: para depurar, evitar la retención de líquidos y reducir volumen
Gingseng: para aumentar la resistencia y la fuerza, aliviar el cansancio y mejorar el ánimo.
Ginkgo biloba: mejora la circulación sanguínea cerebral, mejora la memoria y previene mareos, vértigos, trombos.
Uña de gato: mejora el sistema inmunológico y ayuda a combatir enfermedades y estados carenciales. Aloe vera: para la gastritis y malestares estomacales Manzanilla: antiespasmódico, bueno para dolores del útero. Milenrama: antiinflamatorio, antiespasmódico, tonificante, cicatrizante, digestiva, antiséptico, regula ciclo menstrual.
CONSEJOS PARA RECOLECTAR LAS PLANTAS
En el libro “Manual introductorio a la ginecología natural” de Pabla Pérez San Martín también se abarca el tema de las plantas y las tinturas madres. Para eso, la autora da los siguientes consejos a la hora de escoger las plantas a utilizar: Asegúrate que estás cogiendo la planta que corresponde y observa que no tenga hongos, plagas ni esté en mal estado. Si tienes dudas, es preferible que consultes a un especialista en el tema.
Nunca recojas plantas que están en lugares contaminados, cerca de basurales, carreteras o aguas estancadas. Prefiere los días de sol y en las mañanas para recoger las plantas que usarás en tus preparaciones. Es preferible que no tengan rocío. Lava las plantas con agua hervida fría, quita las partes que contienen tierra y puedes agregarle unas gotas de limón.
Para secar las plantas es muy importante guardarlas en un lugar seco, sin humedad, para que puedan durar por mucho tiempo.