“PASAMOS DE SER FANS A EMBAJADORES DE SODA”
LOS ARGENTINOS DE “SEP7IMO DIA”
De soñadores y fans pasaron a ser anfitriones y embajadores. Los tres argentinos que integran el Cirque du Soleil y despliegan su arte en “Sép7imo Día” (nuevo show inspirado en Soda Stereo que se presenta en el Luna Park), son el clown Toto Castiñeiras (43), la gimnasta rítmica Florencia Aracama (24) y el acróbata Nicolás Busso (28). Ellos fueron admiradores de Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charly Alberti, y hoy no solo celebran ser parte de la compañía circense más importante del mundo, sino que hasta le enseñan castellano e inician en el hábito de tomar mate a sus compañeros de 18 nacionalidades (rusos, ucranianos, ingleses, australianos, neozelandeses, estadounidenses, canadienses, franceses, japoneses y mexicanos). “Me crié en Lomas de Zamora, después me fui a vivir a Ciudad Jardín, de donde es Flor”, cuenta Busso, que está en pareja con Aracama desde hace cuatro años. Florencia interviene y explica el origen de esta mágica historia alimentada por la pasión artística y el amor. “Estuvimos diez años en la Selección Argentina de Gimnasia Rítmica y Artística. Siempre quisimos entrar al Cirque du Soleil porque es como la selección del mundo artístico. Estuvimos viviendo en Israel, donde nos fuimos a perfeccionar. Entrenamos mucho y mandamos videos al Cirque du Soleil en febrero de 2016, en abril tuvimos el primer contacto y en junio ya nos propusieron formalmente integrar el circo”, afirma Aracama.
La idea de Florencia y Nicolás era regresar del exterior y retomar sus carreras universitarias (ella estudia Ciencias Económicas en la UBA, y él, Kinesiología). Pero terminaron enamorándose y compartiendo el elenco de “Sép7imo Día”. “Estábamos de vacaciones en París, y Nico me propuso casamiento arriba de la Tour Eiffel. Cuando bajamos no teníamos Wi Fi, pero cuando fuimos a un restaurante, conseguimos señal, y empezaron a llegarme mensajes del Cirque du Soleil confirmándome que iba a ser parte del espectáculo. ¡Todo el mismo día! Después lo llamaron a Nico para anunciarle lo mismo”, confiesa Aracama, que con su pareja protagonizan el espectáculo que se puso en
venta en noviembre de 2016 y vendió más de 50 mil entradas en 24 horas. Ante el éxito de ventas, se agregaron tres funciones más, el 21 y 28 de abril, y el 5 de mayo. A partir del 14 de mayo, gracias a 20 camiones que trasladarán escenografías, vestuarios, escenario, audio, luces y video, comenzará la gira. El 25 de mayo estrenarán en Córdoba, más tarde seguirá América Latina, y en 2018, Estados Unidos.
La historia de Toto Castiñeiras también está basada en sueños, convicciones y realizaciones. “Nací en Mar del Plata y Soda Stereo me empezó a gustar a los 15 años. De más grande conecté mucho más y sobretodo me enganché con Gustavo Cerati en su obra solista. Trabajé 12 años con “Quidam”, el anterior espectáculo de Cirque du Soleil. Con Michel Laprise, escritor y director de ‘Sép7imo Día’, desde hace seis años proyectamos trabajar juntos, así que con mucho gusto acepté esta propuesta—dice Castiñeiras, que se autodefine como un artista “bien argento”—. Soy el estereotipo argentino, me encanta la carne y el tango, cuando viajaba extrañaba los amigos, la familia, y con este proyecto volví a estar cerca de mi gente. Vivo en San Cristóbal, así que cuando tuve la oportunidad llevé a mis compañeros extranjeros del Cirque du Soleil a casa y a los bares que frecuento en el barrio. Nos dedicamos a hacer ‘buenosairismo’ (Risas). Cuando me fui de la Argentina, en 2004, me llevé el mate y no dejé de transmitir la tradición argenta. Viajé a Montreal a montar el número de “Quidam”, y no dejé de viajar hasta 2015”, agrega.
Toto Castiñeiras habla de la síntesis que generó el show inspirado en la emblemática banda argentina.“No creo que una cosa sea Soda y otra el Circo. Las dos aportaron algo a una unidad. En la previa convocó Soda Stereo y Cirque du Soleil, hoy convoca ‘Sép7imo Día’, como una unidad. Esto es lo que siento como artista del espectáculo. Mi performance con el tema “Sobredosis de TV” tiene esa impronta de los comienzos de Soda, eran desfachatados con cosas muy simples. Además, esa fue una canción emblemática que sonó en todas nuestras fiestas adolescentes”, afirma.
Florencia y Nicolás también eran fans de Soda. En la casa de la gimnasta los padres se la pasaban escuchando a esa banda, mientras que Nico tuvo la oportunidad de asistir al concierto despedida que el trío realizó en River, en 2007.“Estuve en el campo, saltando como loco con las canciones. Y hoy no puedo creer actuar en este show, viendo al público tan emocionado”, comenta el musculoso acróbata. Toto se incorpora a la charla y comenta que cuando se cruzó con Zeta Bosio, le pidió sacarse una foto con él, como un verdadero fan. Y que el bajista se conectó con él desde un lugar de espectador, lo mismo que Charly, los cuales lo felicitaron por su perfomance. El clown además destaca “el sabor” que tendrá la gira que se viene.“Los argentinos siempre nos volvemos una nota de color en todo el mundo.Y en la gira latinoamérica, con este show seguiremos siendo, orgullosamente, referentes de la Argentina”, dice. Sin ocultar el orgullo compartido, Florencia afirma: “Cuando representábamos con Nicolás a la Selección Argentina de Gimnasia Rítmica y Artística y subíamos al podio, nos emocionábamos cuando pasaban el Himno Nacional”. Y Nico continúa, con un cierre que representa a los tres argentinos del Cirque du Soleil: “Ahora, en cada show volvemos a escuchar nuestro otro himno, la música de Soda Stereo. Y agradecemos tanta emoción”, concluye.
“En cada show volvemos a escuchar nuestro otro Himno Nacional, la música de Soda Stereo. Agradecemos tanto honor y emoción”.