“ME CUIDO PARA NO BAJAR DE PESO”
SABRINA ROJAS, BELLEZA EXTREMA
Asegura que transita uno de los momentos más plenos de su vida, tanto laboral como personal. Dueña de una belleza natural que la convierte en una de las mujeres más deseadas de la Argentina, Sabrina Rojas (37) forma parte del elenco de “Golpe al Corazón”, la tira de Telefe encabezada por Sebastián Estevanez (46) y Eleonora Wexler (43). En la ficción, la actriz, es Julieta, la recepcionista de la clínica, donde trabajan Rafa (Estevanez) y Marcela (Wexler) y desde un principio se fascina con el protagonista.
Convertida en actriz desde hace ya unos años, Sabrina dice que esta es la primera vez que participa de una ficción desde el capítulo uno y que lo vive como la gran oportunidad de su vida actoral. Casada con el galán de “Las Estrellas”, la tira de El Trece, Luciano Castro (42) quien es también el padre de sus hijos, Esperanza (4) y Fausto (2) “Sabri” abrió su corazón y habló de su vida con CARAS: “Esta oportunidad que se me presentó vale muchísimo. Me siento genial y confiada. El estar desde el principio hizo que genere un vínculo con todos mis compañeros de elenco. Es algo nuevo para mí, siempre me he sumado a tiras pero nunca estuve desde el capítulo uno y ahora siento que es muy diferente estar desde el primero que entrar en medio de una ficción”, cuenta entusiasmada en Villa Isidro Hotel Boutique & Spa, donde se realizó la producción fotográfica. El lugar está ubicado en el casco histórico de San Isidro y cautivó a la actriz con su magia y estilo.
—¿Cómo vive la experiencia de estar en el Prime Time de la Argentina? —Lo vivo con alegría y un profundo agradecimiento a Quique Estevanez que me dejó ser parte de esto. Es un grupo humano hermoso que la pasa súper bien. Estar rodeada de actores que tienen mucho talento es un honor. Me da placer ir a trabajar, vivimos un clima hermoso. Pude entrar en confianza con todos y son súper generosos.
—Usted graba desde las 8 de la mañana hasta las 6 de la tarde y Luciano también tiene largas jornadas de grabación, ¿Cuándo se reencuentran?
—Tenemos la suerte de tener horarios de grabación iguales así que siempre nos encontramos en casa a la misma hora. Estamos mucho más organizados que el año pasado, cuando yo estaba en “El Bailando .... ” Ahora los dos llegamos casi juntos, organizamos la casa, el baño de los chicos, la comida. Tenemos muchas ganas de verlos y tenemos nuestro rato de juegos los cuatro en el living.
—¿Cómo define su relación con Luciano?
—Ya hace casi 8 años que estamos juntos y logramos formar la familia que soñamos. Ahora lo que hacemos es disfrutarla. Nosotros nos amamos profundamente. Siempre decimos que no sabemos si va a ser para siempre pero día a día nos amamos más. Costó mucho lograr lo que logramos. Cuesta llevar una pareja adelante y hoy la disfrutamos. Tenemos dos hijos maravillosos. Estamos en una etapa muy linda.
—¿Son celosos entre ustedes? —Si, a full (risas). Somos celosos, no llegamos al conflicto de los celos. Yo lo expreso un poco más que él. Quizás él lo hace más tímidamente. Me puse celosa con el tiempo, los hijos me despertaron algo nuevo (risas).
—Imagino que es difícil estar casada con el galán de la televisión Argentina…
—Uff… Es muy difícil. Igual en la cotidianidad trato de no pensarlo porque sino estaría todos los días haciendo terapia. Es verdad que es un hombre hermoso y eso es un tema, pero convivimos con los celos. No me angustia verlo haciendo escenas de romance o hot con otra actriz porque así lo conocí y es parte del trabajo. Ahora si me preguntás si las pudiera evitar, si claro, me encantaría que no las tenga (risas). Igual, repito, no me genera celos. Las cosas cotidianas me dan celos, que las chicas lo busquen, le manden mensajes. El tema de que lo busquen a él me genera más indignación que celos. Me dan ganas de decirle a la que lo busca “Mira loca… Está casado… Tiene una familia… No molestemos por acá”. Igual, si lo veo mirando a alguien me da bron-
ca. Pero me pasa poco por suerte.
—Igualmente su marido siempre tiene gestos y palabras muy románticas para con usted, la pone casi que en un pedestal… —No lo tengo cortito, para nada. Estamos muy enamorados, eso es lo que pasa. Cada año que pasa, lejos de desgastarse la relación, estamos más enamorados y unidos. No creo que me tenga miedo, la verdad que no (risas). Nos respetamos mucho y tratamos de no hacer nada que nos moleste. No nos queremos perder por eso siempre estamos demostrándonos nuestro amor. Las constantes muestras de amor de él o mías salen del corazón para mantener el vínculo. Creo que me tiene tanto amor que por eso me pone tan arriba, además siento que él está agradecido por la familia que formamos. Por supuesto que yo también lo tengo en un pedestal y le agradezco por la familia que me dio.
—¿Siente que lo cambió desde que está con usted? Antes Luciano era mucho más cerrado y no se exponía tanto como quizás lo hace ahora, que hasta comparte sus días en la redes sociales
—Yo creo que sí, pero también creo que es un poco de todo, la madurez y yo. Soy una mina muy sana en mis sentimientos, quizás logré mostrarle otro costado de la vida. Creo que él maduro mucho con el paso de los años. Yo lo conocí en un muy buen momento a Luciano, tanto en su vida como en la mía. Y por eso logramos complementarnos bien, tal vez antes no hubiese funcionado. Su madre siempre me dice “vos domaste a la fiera”. Luciano en realidad siempre fue muy buena persona, todos siempre dicen “che mira el carácter que tiene… Pero es lo más bueno que hay”. Era domarle un poco el carácter, que respire profundo antes de decir las cosas que le molestaban. Creo que también hay prioridades que te van cambiando, el hecho de formar una familia te cambia, y muchas cosas pasan a un segundo plano. Pero puede ser que yo lo haya bajado a tierra, a veces hay hombres que necesitan eso y de repente te topas con alguien que sin querer te acomoda. —Si su marido es uno de los galanes de la TV, indiscutiblemente usted es una de las mujeres más deseadas de la argentina, ¿Cómo se cuida?
—Soy como cualquier mujer. Si engordo un poco empiezo una dieta, voy al gimnasio un tiempo y después quizás no voy más. Lo voy manejando. Tengo la suerte de tener una genética que me ayuda a no engordar. Es más, a veces tengo que tener cuidado porque pierdo peso. Sí creo que debería comer más sano por un tema de la piel. Me pongo cremas a la noche pero no me la paso de tratamiento en tratamiento. No vivo dentro de un gimnasio; como lo que quiero, en la semana me cuido y como sano, para mí la vida es una sola y hay que disfrutarla. Nunca fui una obsesiva con mi cuerpo o mi cara. Sólo quiero que lo que me devuelva el espejo me guste. —¿Tiene tips de belleza? —Me cuesta porque no me cuido mucho. Entrenar entre dos y tres veces por semana, no comer harinas, no comer dulces en la semana. No fumar, no tomar casi nunca alcohol, no tomar café. Me limpio muy bien la cara antes de dormir, me pongo cremas, y me cuido mucho el pelo con baños de crema. —Cuando llegan a su casa con Luciano ¿Cómo se dividen las tareas…? —Yo me ocupo del baño de los nenes y Luciano se ocupa de la cena. El me ayuda a sacar a los chicos de la bañadera y ya tiene todo organizado en la cocina.
—¿Qué cocina el galán de la Argentina?
—Carne al horno, pollo al horno, se las re arregla para cocinar cualquier cosa. Eso sí, si “Lu” está en la cocina ni se te ocurra meterte porque te echa. Cuando uno cocina el otro no se puede meter. Es un gran asador, ahí no lo puedo igualar, hace unos asados increíbles.
—¿Le da consejos a la hora de la actuación?
—Me aconseja mucho, me da tips para poder rendir y no atrasar. Me da consejos de cómo manejarme en el set. Hace poco grabé mi primera esce na de sexo con Sebas y Luciano me aconsejó qué hacer para que me sienta cómoda y sepa cómo manejarme. Me aconseja mucho porque él tiene mucho oficio. Me tira tips para aprenderme las letras.
—¿Qué es lo que más le gusta de su matrimonio?
“Soy una mujer que en lugar de engordar tiende a perder peso por eso me tengo que cuidar, alimentarme bien y sanamente”.