“LA DANZA EMBELLECE EL LENGUAJE DE LA MODA”
ROSELLA DELLA GIOVAMPAOLA: GLAMOUR EN MOVIMIENTO
Pocas presencias son sinónimos de glamour, y la de ella es una de la más emblemáticas. La elegancia natural de Rossella della Giovampaola (54) ya es un sello, aunque muy pocos saben si el charme que ella ostenta se cultiva o si solo es un don con el que se nace. “El famoso ‘charme’ es un conjunto de cosas, no es solo cómo te vestís. Obviamente que el ‘outfit’ ayuda, pero también influye la educación, el respeto, cómo uno se mueve, qué actitud tiene, es más profundo que solo la apariencia— afirma la experta en Glam & Beauty de CARAS—. Igualmente, confío mucho en la fuerza de voluntad. Si uno quiere, puede. Me parece que es una aspiración accesible. Obvio que algunas personas lo tienen de manera natural, pero otras tendrán que trabajar un poco más , agrega.
—Entonces, ¿cualquiera puede tener charme?
—Por supuesto, cualquier persona, porque no es una característica que dependa de una franja social. Tampoco se necesita depender de las grandes marcas, por algo existe la tendencia Low Cost. A mí me encantan los diseñadores clásicos, pero también uno de los lugares que más adoro es Zara. Hay que buscar bastante, lo que sea justo para cada uno, pero es un ejemplo de que se puede tener charme sin gastar fortunas ni tener vestidos “firmados” (creaciones de designers icónicos). También hay miles de mujeres que usan vestidos de grandes diseñadores, carísimos, que no tienen nada de charme. ¿La moda es una forma de arte? Sí, porque no es solo cortar un pedazo de tela y ponerle dos o tres brillantitos, en el cuello o en la manga. Hay muchos diseñadores, pero no sobran los creadores. Porque la creación tiene que ver con la búsqueda de la armonía, y con comunicar algo. Hay vestidos que te pueden causar admiración, por lo lindos, por cómo están hechos, por ser conscientes de todo el trabajo que tienen detrás, es un objeto producto de una creación. —¿Cómo influye una buena silueta para lucir un vestido?
—Hay que tender a un equilibrio, porque hay prendas que si sos muy flaco tampoco quedan bien. No es una
“Danza y moda tienen una historia de colaboraciones. Chanel, Valentino y Versace crearon diseños para ballet.
cuestión de alabar la delgadez, pero es como si fueran perchas: las modelos son flacas porque les ponés cualquier cosa y las prendas tienen buena caída. Es un límite muy sutil, pero es real que desde que empezó la moda se priorizó un estilo de mujer más flaca. Esas modelos son como instrumentos de trabajo para exhibir creaciones. Después la vida es otra cosa. —¿La plasticidad corporal es aliada de la elegancia?
—Cuando uno está tensionado, tiene un cuerpo no muy plástico. Se nota no solo con la ropa sino con cómo se mueve en la vida, cómo se muestra al mundo. Yo hice baile de chica, me encanta danzar, hago Yoga, Pilates… Estoy muy conectada con el cuerpo.
—La danza también tiene un pasado asociado a la moda
—Por supuesto. Danza y moda tienen una historia de colaboraciones. Muchos diseñadores hicieron vestuario de ballet. Chanel hizo diseños para el ballet ruso en los años treinta. Valentino y Gianni Versace también hicieron vestuario para ballet. El punto de contacto entre el mundo de la moda y el de la danza es lo corporal.
—¿Cuáles son los riesgos de etiquetarse” y lucir “como uno más ? —En la moda contemporánea, cada uno puede ponerse lo que quiera. Existe espacio para crear tu propia tendencia y no estar todo el tiempo “encasillado”. Ya no se respetan los mandatos establecidos por cuatro o cinco diseñadores. Pero también existe la logomanía extrema, tendencia sobretodo de los japoneses que van por la calle con la cartera de Gucci, con el tapado de Gucci… Es un estilo muy exagerado. Cuando yo me compro una cartera de marca, lo hago solo porque me gusta, no por lo que representa socialmente. Hay quienes se hacen esclavos de los objetos, de la moda, de aparentar. Mi idea de elegancia no pasa por ahí.