“COMPARTIMOS EL GUSTO POR LA MODA”

ANDREA BURSTEN Y SU HEREDERA ADOLESCENTE FRANCESCA

Aunque las fotografías lo avalan, a Andrea Bursten (45) y a su hija Francesca Ribero (16) las une mucho más que el parecido físico. Cómplices, amigas y mejores confidentes —y protagonistas de la cápsula para el Día de la Madre de lafirmadeindumentariaOKLAN— coinciden en gustos, salidas y charlas “de mujeres” donde no dejan tema sin tratar. “Mi relación con Fran es hermosísima. Siempre fuimos unidas, tal vez la adolescencia de ella nos unió más, hablamos mucho y nos aconsejamos mutuamente. En casa no hay ningún tema tabú y se habla de todo. Dejo que viva con libertad, confío en ella, en quién es y en lo que quiere”, le contó Bursten a CARAS quien reconoce en su heredera rasgos de su propia personalidad. “Es muy disciplinada, perseverante, sabe lo que quiere y va por ello, en eso se parece a mí y a su papá “Fede” Ribero”, advierte. Coquetas por naturaleza, disfrutan de cada oportunidad que tiene al universo fashion como denominador común. “A las dos nos gusta mucho la moda, es algo que hacemos juntas, mirar colecciones y obvio que comprar ropa. Ahora que está más grande podemos compartir algunas prendas, sabe que le presto lo que quiera de mi vestidor”, dice la modelo y empresaria con la que también comparte su afición por la fotografía y gustos musicales “aunque ella escucha lo nuevo y yo lo viejo”. A un año de terminar la escuela y anotarse, quizás, en la facultad de Arquitectura, Francesa no demuestra apuro por encontrar una pareja. “Le encanta escuchar cómo vivía yo el amor a su edad, sobre todo la historia de amor que tuvimos con su papá”, concluye Andrea con el amor más puro que solo una madre siente al ver a su hijos crecer.

Madre e hija posaron en una campaña de indumentaria. Las une la pasión por el arte, la música y se aconsejan en el amor. La joven de 16 años heredó la tenacidad de su papá “Fede” Ribero al que lleva tatuado en la piel.