LETIZIA TRAS LAS CORONAS DE SOFIA
SE ADUEÑO DE “LA RUSA”, DE PERLAS, BRILLANTES Y PLATINO
Las diferencias entre la reina Letizia (46) y su suegra Sofía (80) ya son irreconciliables y cada día crece más la “grieta” entre ellas. Desde hace unos meses comentan en la Zarzuela que la esposa del rey Felipe V (50) está dispuesta a “adueñarse” de todas las joyas que supo lucir su suegra durante su extenso reinado. Y, aunque su objetivo final es la codiciada tiara Niarchos (que el magnate griego Stavros Niarchos le obsequió a Sofía el día de su boda y está cubierta de oro, rubíes y brillantes), por ahora parece conformarse con llevar sobre su cabeza “La Rusa”. Así lo mostró en una comida de gala con el presidente chino. Letizia lució la espectacular corona de brillantes, perlas y platino, que se conoce popularmente con ese nombre ya que fue inspirada en las tiaras de la familia imperial rusa. Y los entendidos en la realeza española afirman que éste es el paso anterior a la Niarchos. Tiara que también tiene una historia familiar de disputas e irreconciliables diferencias entre madres, hijas y suegras que se negaron categóricamente a pasar su corona y terminaron perdiéndola por desinteligencias. Letizia, más inteligente y astuta que muchas de “sangre azul” ya ha demostrado sus habilidades a la hora de las peleas con la madre de su marido. Y ha ido luciendo, una a una, todas las coronas y tiaras que supieron pertenecer a su suegra. Excepto “La Rusa”. Por el momento la reina disfrutó de su glamorosa comida haciendo equilibrio por lucir una corona que, según los expertos joyeros europeos, sería imposible de valorar por su historia y cantidad de oro y piedras preciosas.