“VOY A SER MADRE”
TOBAL: DEL PAPA AL MILAGRO DE LA VIDA
Aquella imagen conmovedora es difícil de olvidar. María Eugenia Tobal (43) apoyó su frente sobre la del Papa Francisco y, mirándolo a los ojos y entre
lágrimas, le confesó su mayor deseo: “Quiero decirle algo. Sólo me falta una cosa para ser feliz... quiero ser mamá”. La respuesta del pontífice fue inmediata: la miró y rezó, renovándole la esperanza. Este viernes 21, Eugenia usó su red social Instagram para confirmar la noticia que hasta entonces era sólo un rumor: “Nada más emocionante y hermoso que confirmar que vamos a ser padres. Fueron meses de mucha ansiedad y temores también. Hoy a la distancia entiendo que sólo hay que comprender los tiempos de la vida. Que las cosas suceden, si tienen que suceder, cuando es el momento indicado... Que desear con el corazón es imbatible y estar rodeado de amor es lo que sostiene y da fortaleza. Tengo al hombre más maravilloso del mundo y hoy juntos hacemos camino al andar. Tenemos la bendición más hermosa en camino”, escribió con la emoción a flor de piel, a sus 43 años. Una felicidad compartida con su pareja desde hace casi dos años, Francisco García Ibar, quien se dedica a adiestrar perros. “Sufrí muchísimo hasta llegar a esta instancia. Cada ecografía y cada estudio es un tema”, dijo la conductora, en diálogo con CNN Radio Argentina.
Incluso Eugenia confesó que cuando conoció a su novio ya había tomado la decisión de ser madre soltera. “Había decidido ser madre a través de un tratamiento, como muchas mujeres lo hicieron. Lo conocí, le conté todo, y me acompañó como amigo hasta que dijimos: ‘Qué pasa acá. Me parece que esto es de a dos, no de a uno’”, contó, y agregó: “La vida me fue demostrando que las cosas llegan de esa forma. Los tiempos de uno no son los de la naturaleza ni los de Dios. Hay que tener paciencia y no bajar los brazos”. La actriz había perdido en 2011 un embarazo de Nicolás Cabré, con quien estuvo casada siete meses y se separó en medio de un escándalo por rumores de infidelidad con Eugenia “China” Suárez. Ahora, la vida le ha dado una nueva oportunidad.
La larga procesión comenzó cuando los médicos le detectaron trombofilia. Desde entonces, se aplica una inyección de heparina diaria. “¡¡¡Tenemos amigos de fierro y hoy también tenemos la bendición más hermosa en camino!!! Son muchas emociones. Sólo decirles gracias a todos por los mensajes hermosos de amor, bendiciones y buenos deseos”, escribió y, sin duda, le dedicó un agradecimiento más que especial al Papa, quien la llenó de optimismo.