Novedades en el tratamiento del cáncer de riñón
Para un subtipo denominado ‘carcinoma de células renales’, en estadio avanzado, que afecta a 2 mil argentinos por año y que entre un 20 y un 30% de los casos se diagnostican cuando la enfermedad ya avanzó, se presentó una novedosa combinación terapéutica con prometedores resultados.
El cáncer de riñón, con cerca de 5 mil nuevos casos cada año, es el quinto más frecuente en Argentina, detrás del de mama, colon, próstata y pulmón. Dentro de esta enfermedad, el 90% corresponde a carcinomas de células renales (CCR). En estos casos, entre un 20% y un 30% se diagnostica cuando la enfermedad se encuentra en etapas avanzadas, y entre quienes se detecta en forma precoz, un 30% desarrollará metástasis en el tiempo. Aquellos pacientes en los que la enfermedad avanza presentan cuadros complejos y agresivos para el que existe una necesidad insatisfecha de tratamientos de primera línea que retrasen la progresión de la enfermedad y ofrezcan un perfil de seguridad aceptable. Entre los factores de riesgo para desarrollar cáncer renal, se destacan el tabaquismo, la obesidad y la hipertensión arterial. Se diagnostica generalmente entre los 50 y los 70 años, con mayor predominancia en el sexo masculino, y los principales síntomas que permiten sospecharlo son dolor persistente al costado del abdomen o en la espalda baja, un bulto en aquellas zonas, sangre en la orina, descenso involuntario de peso, pérdida de apetito, fiebre persistente no causada por una infección, fatiga y anemia. Es muy importante para la especialidad tener disponibles nuevas herramientas de probada eficacia que contribuyen al tratamiento de una difícil condición, como lo es el carcinoma de células renales en estadio avanzado. Afortunadamente, se siguen desarrollando alternativas terapéuticas para ésta y otras enfermedades oncológicas. De hecho, ya está disponible en la Argentina el uso combinado de dos drogas para el tratamiento en primera línea de pacientes con carcinoma avanzado de células renales, una condición de la que en nuestro país se diagnostican unos 2 mil casos por año, a razón de 5 nuevos casos por día en promedio.
Argentina es el segundo país en el mundo —luego de los Estados Unidos— en contar con esta nueva alternativa terapéutica, que demostró reducir un 31% el riesgo de avance de la enfermedad o muerte. Se ha demostrado fehacientemente que la actividad conjunta de ambas medicaciones logra una sinergia que permite alcanzar altas tasas de respuesta, muchas de ellas duraderas, con importantes resultados a favor de aquellos pacientes que transitan por este estadio de la enfermedad. Ofrece además mejor tolerancia que los anteriores tratamientos, lo que representa un beneficio en términos de calidad de vida. La aprobación de la droga avelumab en combinación con axitinib se basó en los resultados del estudio de Fase III JAVELIN Renal 101, en el que se demostró que el nuevo esquema terapéutico mejoraba significativamente la mediana de sobrevida libre de progresión en comparación con la terapia estándar. En dicha investigación, publicada en el New England Journal of Medicine, la tasa de respuesta objetiva (reducción efectiva del tamaño del tumor) se duplicó en la población tratada con la nueva combinación en comparación con el grupo que recibió la terapia estándar (51,4% frente a 25,7%), con una mediana de seguimiento de la sobrevida global de 19 meses. Los resultados de este estudio ponen en evidencia claramente los beneficios de la nueva combinación, con valores contundentes tanto en términos de tasa de respuesta objetiva como en la reducción significativa de la progresión de enfermedad o muerte.