Adiposidades localizadas
La lipólisis química con fosfatidilcolina es un tratamiento efectivo que ayuda a reducir las adiposidades localizadas en diferentes zonas del cuerpo y que no se eliminan con dieta ni ejercicios físicos, pero que sí, éstos colaboran con el tratamiento.
La obesidad es una enfermedad crónica que afecta a un gran porcentaje de la población mundial. En Argentina, se estima que el 61% de los habitantes presenta exceso de peso, de los cuales el 25,4% tienen problemas de obesidad. Es una condición incapacitante ya que aumenta el riesgo de padecer eventos cardiovasculares, enfermedades hepáticas, dificultad para movilizarse y disminución de la calidad de vida de aquellas personas que lo padecen.
Es importante reconocer esta situación como un problema de salud grave. Existen diversos métodos y prácticas por los cuales se puede lograr un efectivo descenso de peso con el correcto acompañamiento profesional. Es fundamental remarcar que la buena alimentación, el ejercicio y la reducción de los niveles de estrés son la base fundamental para lograr con éxito este objetivo. En aquellas personas con peso adecuado que por diversos motivos presentan adiposidades localizadas rebeldes o cuando finalmente se logra el descenso deseado y ésta aún permanece con esta dificultad, la medicina estética ofrece una amplia gama de tratamientos que permiten, con excelentes resultados, una mejora de la zona que se desea tratar. La lipólisis química con fosfatidilcolina es un tratamiento efectivo que ayuda a modelar la figura y a reducir estas adiposidades que no logran combatirse con ejercicio ni dieta.
Pero … ¿Qué es la fosfatidilcolina? Es una sustancia presente de forma natural en las membranas celulares y al ser inyectada en el tejido graso tiene la propiedad de generar cambios en la membrana de las células grasas provocando su ruptura y consecuentemente la eliminación de lípidos. Esto
provoca que los componentes lipídicos se vuelvan solubles y se eliminene fácilmente.
¿Qué zonas se pueden tratar?
Pantalón de montar.
Flancos.
Abdomen.
Brazos.
Cintura.
Zona submentoniana (papada).
Bolsas palpebrales.
El tratamiento se caracteriza por ser indoloro y se realiza con una frecuencia de aplicación semanal. Luego de la inyección se produce una inflamación local con presencia de eritema y edema que permanece aproximadamente entre 2 y 3 días, y el mismo se resuelve sin complicaciones. Es importante destacar que frente a esta situación el paciente debe usar una faja o calza ajustada para utilizar luego de la sesión y durante los dos o tres días posteriores a la misma con el fin de disminuir al mínimo la inflamación o edema antes mencionado. Se requieren generalmente un mínimo de 4 sesiones en una zona para lograr y consolidar resultados visibles.
¿Cuáles son las contraindicaciones del tratamiento? El uso en niños, embarazadas, diabéticos con microangiopatía, patologías renales, enfermedades reumáticas, obesidad, resistencia a la insulina, síndrome de ovario poliquístico.
Es fundamental la evaluación médica previa en la que se detectaran, mediante la realización de una historia clínica detallada, aquellas condiciones que contraindiquen la aplicación del tratamiento y en la cual se establecerá el plan de tratamiento adecuado a cada paciente.