“EL POSFEMINISMO ES MOSTRAR EL CUERPO Y PENSAR”
DEBORA PLAGER, EN MALDIVAS
Una década de amor y un nuevo cumpleaños fueron las excusas perfectas para un viaje sorpresa que la llevó a cruzar el mundo en busca del paraíso. Lo que parecía un sueño lejano se convirtió en realidad cuando su marido, José Luis Rodríguez Pagano (50), le confirmó a Débora Plager (50) que la fantasía de conocer las Islas Maldivas se haría realidad. Once horas para conectar Buenos Aires con Madrid; volar al día siguientes seis horas hasta Doha, Qatar, y luego conectar con otro avión hasta Male, Maldivas, para, ahora sí, tocar el cielo con las manos. Es cierto, una imagen vale más que mil palabras, pero tratándose de Plager, bien vale la pena conversar con ella acerca de esta experiencia.
En exclusiva para CARAS, la conductora y periodista reflexio
na sobre la mujer que se destacó a base de esfuerzo y talento, su “destape” y la proclama de que mostrar el cuerpo y pensar, finalmente sean una etapa superadora del feminismo. Por último, no le esquiva a la inesperada propuesta que recibió para ser parte del “Bailando 2020”.
—-¿Cómo surgió la idea de viajar a las Islas Maldivas? —Me encontré un dia con fotos de un lugar que me pareció el paraíso en la tierra. Busque dónde era y resultó ser Maldivas. —¿Conocía el destino?
—No conocía las islas. Miré el mapa y descubrí que para llegar debía cruzar el mundo. Están situadas en el océano Índico, al sur de La India. Son 1.190 islas distribuidas en estructuras de coral separadas por lagunas. Se lo comenté a José Luis y lejos de decirme que era una locura, se puso a trabajar en el proyecto sin darme muchos detalles. Sería la sorpre
“Antes de viajar recibí la oferta del “Chato” Prada y Fede Hoppe. Me trataron muy bien. Lo estoy analizando, aún no está decidido.”
sa por mi cumpleaños, el sueño cumplido.
—¿Qué le impactó del lugar? —Las Maldivas superaron todas mis expectativas. El contacto con la naturaleza, el clima, la temperatura del mar, todo es perfecto.
Sumergirme en las aguas cristalinas para observar la enorme diversidad de especies marinas o nadar con tiburones, fueron experiencias inolvidables. Ni hablar de volar en hidroavión para llegar a una de las islas. José Luis se ocupó de que todo saliera maravilloso.
—¿Fue momento de hacer balances a nivel personal y laboral?
—No me gustan los balances.
Trato de no mirar demasiado hacia atrás. Prefiero enfocarme en el presente e ir para adelante. No obstante no puedo dejar de decir que en relación con mis afectos, mis hijos, mi pareja, mis padres, el balance es excelente. Además tener continuidad laboral desde hace tantos años y reconocimiento es para agradecer.
—¿Cómo definiría este momento de su vida?
—La verdad es que estoy llena de proyectos y propuestas profesionales. Es sin duda un buen momento.
—¿Se siente plena?
—En cuanto a la plenitud, no la puedo asociar con lo laboral. Si puedo hacerlo respecto de mi rol como madre. Mis mellizos de 18