OTOÑO -INVIERNO: PARIS FASHION WEEK
MARATON DE INNOVADORES ESTILOS
París es la última de las cuatro ciudades de la moda en hospedar el Fashion Week: entre maisones históricas y nuevos talentos, la capital francesa desde hace más de un siglo está en primera línea en cuanto a innovación y excelencia en la moda. Desde los tiempos de Paul Poiret a las creaciones surrealistas de Schiaparelli, desde el lujo informal de Chanel al “New Look” de Dior, desde los outfit “space-age” de Courrèges a “Le Smoking” de Yves Saint Laurent hasta las extravagancias del “enfant terrible” Jean Paul Gaultier, la ciudad sigue contando en forma impecable el mix entre “heritage” prestigioso y sorprendentes novedades.
París reivindica la paternidad de unas de las maisones más amadas y prestigiosas entre las cuales esta Dior. El desfile del brand que tiene como director creativo a la italiana Maria Grazia Chiurri, ha sido el primero de la París Fashion Week para el Otoño/Invierno 2020/2021 y en esta ocasión también lo hizo con un potente mensaje feminista.
Esta vez el artista, al cual Chiuri se entrega, fue Claire Fontaine, quien realizó la escenografía que tenía unos manifiestos iluminados colgando y un patchtwork de diarios en el piso. Sobre la pasarela se vio un triunfo del look hippie chic, con bandanas en la cabeza y muchos flecos, que serán el trend para la próxima temporada. La mujer de Dior luce tailleur sastre de sacos “Bar” y jumpsuit en cuero así como en denim, mientras alterna abrigos de lana tejida a capas très chic. Maria Grazia se divierte al mezclar “patterns” e inspiraciones: el príncipe de Galles y el camouflage, faldas de tulle y sweater casual y roba objetos hasta ayer propios del guardarropas masculino, como la
corbata y el gilet, y los presenta más femeninos que nunca.
Ninguna escenografía infartante esta vez para Chanel, sólo un elegante escenario total white y una pasarela de espejo sobre la cual las modelos caminan de a dos. Así presentó Virginie Viard la nueva colección Otoño/Invierno 2020/2021, con un desfile transmitido por primera vez en streaming desde el Grand Palais de París.
La colección, muy versátil y fácil de lucir, está formada por elegantes prendas, como los icónicos sacos en tweed, las blusas y los abrigos sastre, y por piezas de “allure” más moderno, como los shorts , los cross tops y los vestidos offshoulders.
Gran protagonista de la colección es el saco: para el Otoño/Inverno 2020/2021 la Viard pensó al saco de cuero “cropped” con mangas pronunciadas o con detalles de plumas, mientras los sacos de los tailleur, en tweed, lucen una “silhouette” decisivamente más alargada y se combinan elegantemente con faldas derechas. Entre los vestidos resaltan los suntuosos maxidresses de terciopelo negro, vestidos offshoulders, chemisiers con la cintura ceñida y modelos sin mangas presentados con un jersey de encaje abajo. Un ejército de modelos luciendo abrigos cruzados de color azul y de estilo militar abrió el desfile de Balmain para el próximo invierno europeo. Seguras, fuertes y determinadas, las mujeres Balmain avanzan sobre el catwalk y traen a la memoria aquel estilo “women power” que marcó en forma significativa los años ochenta. En la colección están todos los elementos icónicos del guardarropa femenino de aquellos años y todo el hedonismo maximalista de la época, empezando por los colores (rojo, negro, blanco y azul ) pasando por los gloriosos sacos con hombreras XL, abrigos “uniforme”, vestidos de paillettes con enormes volados, conjuntos estampados estilo “foulard” y los maxi sweaters trabajados con oro para terminar con los cuissardes y los slouchy boots.
Clare Waight Keller, directora creativa de Givenchy, presentó la colección para el Invierno 2020/2021 en el Hipódromo de Longechamp. Sobre la pasarela se alternaron vestidos de corte bien definido en los tonos blanco y neutros, con vestidos más coloridos y sueltos en fantasías gráficas. Las prendas de esta colección parecen inspiradas en las propagandascinematográficasdelaNouvelle Vague. Interesante el juego de volúmenes de los abrigos y de las capas que otorgan un toque futurista, mientras el contraste de trasparencias y plumas regalan feminidad y elegancia a la colección.
Una vez más Sarah Burton ha logrado crear un universo coherente a sí mismo para esta increíble colección de Alexander McQueen para el Otoño/Invierno 2020/2021. Después de catorce años trabajando al lado de Alexander, la designer sigue con gracia y magnitud la poética de su predecesor mezclando la nostalgia de lo que fue con cortes modernos y líneas de vanguardia. Los viajes de búsqueda de Sarah para diseñar las colecciones Alexander McQueen ya son legendarios y en esta ocasión ha sido un paseo por la campiña galesa lo que inspiró vestidos celestes drapeados con guirnaldas decoradas, sacos de hombreras importantes, cortes de cuero y los sweaters gráficos.
Como de costumbre, el desfile de Louis Vuitton en el Louvre cerró la maratón de la moda parisina y cuando hablamos de Vuitton nos encontramos frente a una dimensión de la moda completamente diferente a todo lo que vimos hasta ese momento. Para la histórica maison de maroquinerie, el director creativo Nicolas Ghesquière traduce su estética en visiones nunca banales. A la inmediatez prefiere recorridos creativos difíciles, voluntariamente de elite o poco comprensibles para los demás, seguramente no descifrables para los cánones tradicionales: los sacos para el Otoño/Invierno 2020/2021 y las camperas biker que se vieron sobre la pasarela son la parte más tangible. Los sacos de cuero que parecen un experimentos de tailoring juntos a las camperas son lo más “edgy” y “avant garde” que podríamos ver o lucir para la próxima temporada.
Hay camperas tecno en versión “ski jacket” y sacos de cuero con hombreras que chocan con los tailleurs a rayas y las faldas derechas, mientras los bomber en cuero negro estilo años setenta vienen presentados con pantalones de zip y patch. Los blazer estructurados se transforman en “spencer jacket” recién salidos de un paddock del Moto GP y los sacos estilo “torero” súper bordados y enriquecidos por pequeños detalles, se lucen con pantalones biker, en un choque entre un mundo sporty y el classicismo “folk”. Una colección que es un verdadero choque con una idea de la moda que vive “aquí y ahora”, totalmente afuera de los esquemas.
La icónica malla metálica de Paco Rabanne llega con inspiración medieval y religiosa. Una apuesta psicodélica, avan-garde y chic.