MAXIMA: UNA “WORKING ROYAL”
NO TIENE DESCANSO EN SU AGENDA CONTRA EL COVID 19
Mientras en Holanda la cifra de muertos que ya se cobró el coronavirus superó los 30 mil, la reina Máxima —que el domingo 17 celebra, en la intimidad de su hogar, sólo junto al rey Guillermo (53) y a sus hijas, Amalia (16), Alexia (14) y Arianne (13) los 49 años— volvió a dar claras muestras de su compromiso con los trabajadores. En esta oportunidad, la monarca visitó una fábrica de barbijos en Alkmaar y charló con los profesionales que allí desarrollan las nuevas técnicas para realizar los “tapabocas” con mayores medidas de seguridad. Como una “Working Royal” que no le teme a nada, la esposa del rey Guillermo (53) lució un palazzo negro que acompañó con chaqueta blanca entallada y abotonada en la espalda, rematando en moño chato en la delantera. Completó su look con stilettos negros con recortes en PVC transparente, clutch, pocas joyas y su melena suelta y muy natural. Con esta nueva aparición pública, Máxima volvió a convertirse en la mujer de la realeza más admirada del mundo. Ya que, según comentan, todas las Casas Reales de Europa “ordenaron”a sus integrantes a seguir su ejemplo en un claro guiño con el pueblo para lograr levantar sus alicaídas imágenes y ganarse un poco de simpatía plebeya. Lejos de la envidia que cada una de sus acciones solidarias provoca en los diferentes países, la reina holandesa mostró su interés por cada nuevo barbijo, preguntó a los profesionales todo lo que no sabía y jamás perdió su sonrisa “cálida y amiguera”, como la definen.
“Lució un palazzo negro con camisa blanca con botones en la espalda y su melena natural”.