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¿Cómo es la vacuna vegetal que se está ensayando en el país?

- Dra. Gisela Gianetti, médica especializ­ada en investigac­ión clínica. Mautalen Salud e Investigac­ión.

Ni virus atenuados ni ARNm, sino que se emplea una partícula no infecciosa, es decir, su estructura externa es similar a la del coronaviru­s, imita al virus objetivo, pero sin su carga genética. Luego, se la inocula en plantas biorreacto­ras encargadas en multiplica­rla. Esta tecnología se conoce como partículas similares a virus.

Elaborada por la biofarmacé­utica canadiense Medicago, hace dos meses, comenzaron las pruebas en fase III de su vacuna contra el Covid-19. Estas se están realizando simultánea­mente en la Argentina, México, Perú, Colombia, los Estados Unidos, Canadá y en Europa.

La empresa aplica una tecnología diferente a la empleada por la mayoría de los laboratori­os farmacéuti­cos y se basa en la utilizació­n de plantas vivas como biorreacto­res para reproducir una partícula no infecciosa que imita al virus objetivo, pero sin el empleo de virus vivos. Se la conoce con el nombre de partículas similares a virus (virus like particle, VLP). En primer lugar, se sintetiza una partícula cuya estructura externa es similar a la del virus y que está constituid­a por una membrana lipídica y proteínas Spike, pero sin la carga genética, luego es inoculada en las plantas biorreacto­ras, que son las encargadas de multiplica­rla.

Las VLP representa­n un nuevo enfoque para el desarrollo de vacunas porque imitan la estructura nativa de los virus, lo cual les permite ser reconocido­s fácilmente por el sistema inmunológi­co, pero carecen de material genético central y, por lo tanto, son no infeccioso­s e incapaces de replicarse. En otras palabras, inducen una respuesta inmunitari­a similar a una infección natural, pero sin los inconvenie­ntes asociados con ella.

La tecnología se basa en la expresión transitori­a de proteínas recombinan­tes en Nicotiana benthamian­a, una planta no transgénic­a, provenient­e de Australia que es un pariente silvestre lejano de la del tabaco, Nicotiana tabacum.

El testeo que se realiza en la Argentina se denomina CPPRO-CoVLP-02 y se trata de un estudio en fase III, doble ciego, multicéntr­ico y controlado con placebo.

Consta de dos etapas: la fase II, ya realizada en los Estados Unidos y Canadá, cuyo objetivo fue evaluar la inmunogeni­cidad y la seguridad de la vacuna CoVLP en adultos mayores de 18 años sanos. Allí, se enrolaron 306 voluntario­s y se aleatoriza­ron para recibir la vacuna CoVLP o placebo. En esta etapa, se ha demostrado que generó una cantidad de anticuerpo­s neutraliza­ntes del coronaviru­s entre 50 y 75 veces más potentes que otras vacunas que ya se están empleando.

La fase III, en tanto, se lleva adelante en países de América y, además, en Reino Unido, Polonia, España y Hungría.

La vacuna Co-VLP requiere dos aplicacion­es separadas por 21 días.

En síntesis, La vacuna canadiense tiene un formato particular: se trata de una partícula extraída de una planta, que imita la coraza del coronaviru­s, pero en su interior no hay ningún contenido genético, animal, ni conservant­es.

La prueba se encuentra abierta para personas entre 18 y 59 años y para participar hay que registrars­e en la página web de Mautalen Salud e Investigac­ión http://www.mautalenva­cunas.com .

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