LA VIDA FRUGAL DE ELINA Y EDUARDO COSTANTINI
EN SU CASA DE PUNTA, “NUESTRO AMOR”
Desde que sellaron su boda el 22 de febrero de 2020 en el hotel Alvear, un mes antes de que en Argentina se decretara la cuarentena, Elina Fernández (30) y Eduardo Costantini (74) vivieron épocas desafiantes con el amor como bandera. Luego de vivir unos meses en Miami, donde el empresario tiene diversos negocios inmobiliarios, se mudaron a Punta del Este. Allí comparten una vida frugal, en la histórica casa del creador de Nordelta. A comienzo de año, un dato dio cuenta del excelente momento que vive la relación. Costantini decidió rebautizar su refugió como
“Nuestro Amor”, y así lo definió en su momento: “El amor de Elina, que es el amor de mi vida, para mí en este momento es central. Hoy por hoy es la persona con la que más tiempo comparto. Mi familia respeta mi vida de pareja, y mi felicidad es la felicidad de ellos. Yo los considero algo esencial, pero al mismo tiempo miro hacia adelante”.
Según confesó, esta es su casa preferida. Se estima que la cotización en el mercado es de siete millones de dólares, valor impulsado especialmente por la inmejorable ubicación. Sobre todo para él, que cada verano parte desde esa playa en su kite, deporte en el que es pio
nero. “Más allá de que estaba un poco venida abajo, yo quería darle mi estilo. Ponerle mi toque de amor a la casa, a nuestra casa. Y se dieron situaciones como que por primera vez en su vida Eduardo armó el arbolito de Navidad. Me gusta estar en la casa. Cocinar juntos. Compartir la vida y nuestros sueños. El es un hombre muy cariñoso, le gusta la vida al aire libre, los deportes y los animales. Es ágil, divertido y por sobre todo, tiene una energía que me supera notablemente. Vivir junto a el es valorar el amor y el verdadero sentido de la vida”, contó Elina, en una de sus tantas anécdotas compartidas con el amor de su vida.