Dying to Survive
Introducción:
Cheng Yong maneja una tienda de productos para el cuidado de la salud. A una edad madura, Cheng es un hombre divorciado, frustrado y se halla en un aprieto por la gran cantidad de dinero que necesita para la urgente operación de su padre. La llegada de Lv Shouyi, un paciente de leucemia mieloide crónica, le abre una salida: contrabandear el medicamento genérico contra dicha enfermedad desde la India. Es así como Cheng empieza su camino de contrabandista.
Su negocio anda viento en popa. Muchos pacientes de leucemia mieloide crónica, quienes no pueden comprar el medicamento de manera legal por su elevado precio, tienen ahora una esperanza para seguir viviendo.
La popularidad del medicamento contrabandeado llama la atención del fabricante legal, quien pone una denuncia. Frente al riesgo de ir a prisión, Cheng entrega el canal de venta a un traficante de medicamentos apellidado Zhang, quien incrementa de tal manera el precio que los pacientes más pobres se vuelven a ver en la incapacidad de comprarlos.
Unos años después, la llegada de la esposa de Lv Shouyi rompe la tranquila vida de Cheng Yong. Lv está por morir debido a que no puede adquirir el remedio contra la leucemia mieloide crónica. Alarmado por la noticia, Cheng vuelve a contrabandear el medicamento. Esta vez, ya no por interés económico, Cheng lo vende a un precio muy bajo.
Cheng Yong es detenido. En la última escena, los pacientes de leucemia mieloide crónica aparecen a ambos lados de la carretera por donde pasa el vehículo policial que traslada a Cheng para pedir tolerancia a la autoridad y expresarle apoyo y agradecimiento al hombre que les ha querido ayudar.
El año pasado, Dying to survive fue la película más taquillera en China. No se trata de una película de ficción, sino de una realista, cuya historia se basa en hechos reales.
En 2014, una noticia fue muy comentada por la gente. Lu Yong, un paciente de leucemia mieloide crónica, fue detenido por vender “medicamentos falsos” contra dicha enfermedad, importados de la India. A pesar de que la caja costaba 200 yuanes (frente a los más de 20.000 yuanes en China) y de que tenía verdaderos efectos en los pacientes, el medicamento era considerado falso de acuerdo con las leyes chinas por no haber adquirido un permiso de venta. Sin embargo, más de 300 pacientes firmaron una carta en la que solicitaban la exoneración de responsabilidades penales para Lu Yong.
Al final, Lu fue absuelto. Asimismo, se promovió la inclusión de los medicamentos contra el cáncer en el seguro de salud a nivel nacional.
Dying to survive es una producción que devuelve dignidad a la película realista en China, donde el entretenimiento está presente en casi todas las pantallas grandes del país. Enfocada en los sectores más necesitados de la sociedad, sus personajes son individuos comunes y corrientes que luchan por sobrevivir frente el alto precio de los medicamentos.
Datos del director:
Dying to survive es la ópera prima del director Wen Muye, quien relata una historia completa y transmite la persistencia e incansable pasión de sus protagonistas por sobrevivir, sin importar la situación en la que se encuentren.
“Como director, lo más importante no es la tecnología, sino la visión del mundo y de los valores”, indicó Wen. “Siempre se debe fomentar que alguien se atreva a dar una opinión, incluso si se trata de una idea particularmente simple”.