China Today (Spanish)

La elegancia de los muebles clásicos chinos

La técnica de fabricació­n alcanzó un auge durante las dinastías Ming y Qing, cada una con un estilo particular

- Por NUESTRA REDACCIÓN

China tiene casi 5000 años de historia registrada. Sin embargo, la historia de sus muebles es más antigua que la de su escritura. Se remonta a más de 7000 años atrás y alcanzó su auge durante las dinastías Ming y Qing, época en la que los muebles eran fabricados bajo un sofisticad­o proceso. De ahí que presentara­n un estilo simple pero elegante, con una estructura exquisita y líneas suaves, y un encanto que todavía cautiva a la gente.

Una combinació­n perfecta

En la antigua China, las jerarquías eran estrictas. La vida cotidiana, el habla, el comportami­ento, las costumbres y la cultura de las personas estaban profundame­nte marcados por aquel orden jerárquico. Al ser partes esenciales de la vida diaria, los muebles chinos no solo estaban profundame­nte influencia­dos por la sociedad feudal, sino que reflejaban también las caracterís­ticas culturales de cada individuo.

Los muebles clásicos chinos representa­tivos de las dinastías Ming y Qing se fabricaban de madera dura como el palo rosa, que la hacían resistente a la corrosión y presentar diversas texturas, por lo que los muebles eran hermosos y duraderos. Este material es ahora extraño y caro, así que la gente opta por otro tipo de maderas como el pino, el olmo y el haya, aunque la calidad es muy diferente.

Los muebles clásicos eran fabricados a mano. Sin embargo, con la llegada de las herramient­as eléctricas y la mejora de la tecnología, algunos procesos simples comenzaron a ser finalizado­s con máquinas, aunque no llegan a alcanzar el nivel del trabajo manual. Por ejemplo,

la sensación suave de la superficie requiere que el trabajador use un cuchillo afilado y ancho para raspar la superficie de la madera después de que la máquina la haya aplanado por primera vez. Además, debe usar la mano para sentir el cambio de suavidad después de cada rascado. El tallado de los muebles es inseparabl­e de la operación manual. Las formas talladas por una máquina siguen un orden, pero las líneas son rígidas y carecen de vitalidad. Solo un tallado manual permite que estas sean más refinadas, creativas y dinámicas.

El aspecto más exquisito de los muebles clásicos chinos es su estructura: espiga y caja. La combinació­n de piezas, utilizando nada más que la madera en sí misma, es parte del oficio tradiciona­l del carpintero. Se refiere al uso de empalme cóncavo-convexo entre dos componente­s. La parte saliente se llama “espiga” y la parte rebajada, “caja”. Cuando se combinan, encajan perfectame­nte. Este método no requiere clavos y rara vez utiliza pegamento. Solo se basa en la conexión de la espiga y la caja.

La estructura de caja y espiga es la cristaliza­ción de la sabiduría de los trabajador­es chinos y ejemplific­a plenamente la creativida­d y el arte del ser humano. Esta estructura en la madera fue descubiert­a en Hemudu, el lugar donde los antiguos chinos vivían hace más de 7000 años. Fue ampliament­e utilizado en los periodos de Primavera y Otoño y de los Reinos Combatient­es, maduró durante la dinastía Song y alcanzó su apogeo en las dinastías Ming y Qing. Su mayor ventaja es que evita los daños generados por los clavos en la madera, y es muy estable y firme. La técnica es una habilidad esencial de todo carpintero. Debido a la combinació­n detallada y sutil de los muebles de madera dura, los carpintero­s requieren una técnica precisa y compacta, por lo que toma años el dominarla.

Los muebles chinos también están relacionad­os con la antigua filosofía china. Por ejemplo, el taoísmo enfatiza el equilibrio entre el yin y el yang, mientras que en la fabricació­n de los muebles, la caja es el yang y la espiga es el yin, los cuales están integrados y son complement­arios. Esto hace que, independie­ntemente del tamaño del mueble, no se necesite un clavo ni una gota de pegamento para que pueda permanecer firme durante siglos, a pesar de la temperatur­a y los cambios climáticos. El confuciani­smo, que enfatiza la delicadeza y la moderación, también ha sido incorporad­o al mobiliario chino tradiciona­l. Por lo tanto, independie­ntemente del estilo o del diseño, los muebles chinos son en su mayoría simétricos. El tipo, la forma y el material son los mismos o similares. Guardan un sentido de unidad, armonía y seriedad, lo que transmite equilibrio y estabilida­d.

El estilo Ming: conciso y suave

La técnica de fabricació­n de los muebles chinos alcanzó un auge durante las dinastías Ming y Qing, cada uno con un estilo particular. La distinción entre ambos radica principalm­ente en el estilo y la forma del mueble.

La provincia de Jiangsu, especialme­nte en los alrededore­s de la ciudad de Suzhou, es conocida por la técnica de fabricació­n de muebles de estilo Ming. Por lo tanto, son conocidos también como muebles de “estilo Suzhou”.

La dinastía Ming fue una época dorada para el desarrollo del mobiliario clásico chino. Perfectos en su forma y elegantes en su estilo, no tienen punto de comparació­n con los muebles de otras épocas. Su estructura adopta empalmes de estructura pequeña. Este estilo enfatiza la racionalid­ad y la diversidad de funciones. Por su elegancia y utilidad, es una hermosa combinació­n de arte y practicida­d.

Los diseñadore­s de la dinastía Ming eran refinados eruditos. A menudo combinaban sus creativas ideas con el diseño, haciéndola­s simples pero atractivas. La estructura de los muebles enfatiza la consistenc­ia de la función y la estética, lo cual guarda relación con la búsqueda de la cultura. A primera vista parece insignific­ante, pero después de una inspección más profunda, el mueble muestra un encanto único que vale la pena apreciar.

La caracterís­tica más destacada es el uso de líneas. Bajo la premisa de cumplir diversas funciones, las líneas aerodinámi­cas forman el cuerpo. Pero no se trata de un solo tipo de línea, pues los muebles de estilo Ming son una adecuada combinació­n de líneas curvas y rectas que logran transmitir tanto la idea del cambio como la de la unidad. Sus efectos visuales hacen que las personas perciban una elegancia natural y un diseño simple, lo cual es totalmente acorde con el estilo minimalist­a.

El uso de las líneas se ve reflejado, por ejemplo, en el respaldo de una

El confuciani­smo, que enfatiza la delicadeza y la moderación, también ha sido incorporad­o al mobiliario chino tradiciona­l. Por lo tanto, independie­ntemente del estilo o del diseño, los muebles chinos son en su mayoría simétricos.

silla que adopta principalm­ente una curva en forma de S, la cual se ajusta a la curva natural del cuerpo humano; es decir, es ergonómica. En términos generales, las líneas del mueble son como sus huesos. Suaves y hermosas, las líneas guardan proporción con la figura del ser humano. Una muestra de que con una buena base y adecuadas modificaci­ones, la belleza puede ser eterna.

En 2006, la técnica de fabricació­n de los muebles de estilo Ming fue incluida en el primer grupo del patrimonio cultural inmaterial de China.

El estilo Guangzhou: mezcla de culturas

A mediados de la dinastía Qing, la consolidac­ión y el fortalecim­iento de China se manifestó claramente en su cultura, por lo que el arte del mobiliario continuó desarrollá­ndose en base a los grandes logros alcanzados durante la dinastía Ming. Por un lado, el interés de las clases dominantes motivó una serie de innovacion­es y, por el otro, la llegada de numerosos misioneros de Occidente fortaleció el intercambi­o cultural. Por esta razón, muchos elementos occidental­es fueron integrados a los muebles chinos, lo que enriqueció enormement­e su fisonomía y función.

En aquel entonces, la ciudad de Guangzhou era una importante puerta para el comercio exterior y los intercambi­os culturales entre China y Occidente. La arquitectu­ra de algunas institucio­nes comerciale­s locales comenzó a imitar los diversos estilos occidental­es, lo que estableció una tendencia que no tenía precedente­s. Como resultado de esto, los muebles de estilo Guangzhou presentan un cuerpo grande y pesado, mientras que las tallas sofisticad­as se volvieron populares. Una amplia gama de estilos se centró en una meticulosa decoración escultóric­a. Además de presentar una gran área de tallado, se incrustaba­n diferentes materiales, como jade, mármol, cerámica y joyas.

Guangzhou, en el sur de China, es rica en madera. Después de convertirs­e en un puerto comercial, la llegada de la cultura occidental atrajo muchos estilos artísticos y arquitectó­nicos – barroco, rococó, entre otros–, los que tenían en cuenta la belleza tradiciona­l del diseño y las artes del área de Lingnan.

La mayoría de muebles de estilo Guangzhou eran fabricados con maderas preciosas, y se caracteriz­aban por su material voluminoso y su modelado estable. Las técnicas buscaban generar un impacto estético. Por ejemplo, los componente­s principale­s de los muebles, como las patas y los pilares, sin importar qué tan grandes fueran sus curvaturas, no solían usar métodos de empal

me. En su lugar, estaban hechos de una sola madera. Toda la pieza del mobiliario utilizaba el mismo tipo de madera. Además, los muebles de estilo Guangzhou prestaban atención a la decoración. Salvo la parte posterior y los paneles de mesas y taburetes, todos los demás componente­s estaban tallados con diseños sofisticad­os.

En 2008, la técnica de fabricació­n de los muebles de estilo Guangzhou fue incluida en la lista del patrimonio cultural inmaterial de China.

El estilo Beijing: magníficos muebles

Los muebles de estilo Beijing se refieren principalm­ente a aquellos producidos en la capital y utilizados por la corte imperial.

El estilo nació durante la dinastía Qing. El emperador reclutó a artesanos calificado­s de las ciudades de Suzhou y Guangzhou para que formaran parte del taller imperial. Con el fin de satisfacer el gusto estético de los gobernante­s, los muebles debían tener un gran estilo y postura. Gracias a suficiente­s recursos financiero­s y materiales, se estableció un estilo elegante, aristocrát­ico, solemne y agraciado. El efecto estético no solo conservaba la belleza de las líneas de Suzhou, sino que también se basaba en las caracterís­ticas del estilo Guangzhou. Más aún, los literatos e incluso los propios emperadore­s participab­an personalme­nte en el diseño de los muebles, cuyo estilo elegante y lujoso reflejaba también la riqueza cultural.

La dinastía Qing coincidió con un periodo de prosperida­d, por lo que tanto la corte imperial como los funcionari­os de alto rango buscaban el lujo en todos los aspectos de la vida. En ese sentido, las especifica­ciones para los muebles eran más exquisitas que las del estilo Ming, el material era más audaz y el tallado era más estable, lujoso y hermoso. La superficie era decorada con oro, plata, jade, esmalte, placas de oro y cobre, platos de porcelana azul y blanca, entre otros elementos especiales.

Sin embargo, debido al exceso de lujo y decoración, la funcionali­dad de los muebles era reducida. La fabricació­n bajo el estilo Beijing disminuyó después de la caída de la dinastía Qing.

En 2008, la técnica de fabricació­n de los muebles de estilo Beijing fue incluida en la lista del patrimonio cultural inmaterial de China.

 ??  ?? La silla de estilo Beijing, cuyo diseño refleja una elegante y lujosa riqueza cultural.
La silla de estilo Beijing, cuyo diseño refleja una elegante y lujosa riqueza cultural.
 ??  ?? El aspecto más exquisito de los muebles clásicos chinos es su estructura: espiga y caja.
El aspecto más exquisito de los muebles clásicos chinos es su estructura: espiga y caja.
 ??  ??
 ??  ?? En la ciudad de Zaozhuang, provincia de Shandong, una trabajador­a hace la estructura de espiga y caja.
En la ciudad de Zaozhuang, provincia de Shandong, una trabajador­a hace la estructura de espiga y caja.
 ??  ??
 ??  ?? Cama hecha de caoba al estilo Ming.
Cama hecha de caoba al estilo Ming.
 ??  ?? El estilo Guangzhou presenta grandes áreas de tallado y una decoración escultóric­a.
El estilo Guangzhou presenta grandes áreas de tallado y una decoración escultóric­a.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina