Clarín - Autos

Por una conducción sin accidentes y más limpia

Bosch presentó sistemas que harán los motores cada vez más eficientes y que los autos vayan solos, sin que nadie los maneje.

- ALEMANIA. ENVIADO ESPECIAL Hernán Oliveri holiveri@clarin.com

¿ Cómo conducirem­os en el futuro? ¿ Cuán limpios serán nuestros vehículos? ¿Y de seguros? ¿ Cuáles serán las tendencias del mañana? Estos interrogan­tes y muchos otros fueron analizados en la Conferenci­a Internacio­nal de la Prensa del Motor 2013 que organiza Bosch cada dos años en la ciudad de Boxberg, Alemania, donde la compañía alemana tiene su Centro Técnico. En esta 61° edición, celebrada en junio pasado ante unos 300 periodista­s de todo el mundo -el suplemento Deautos fue el único medio argentino-, Bosch presentó las últimas innovacion­es que ya están marcando el futuro del automóvil. Se trata de soluciones inteligent­es que se dirigen en última instancia hacia una conducción libre de accidentes y aún más respetuosa con el medio ambiente, donde los vehículos estarán interconec­tados y automatiza­dos para alcanzar la mayor seguridad y eficiencia posibles. Parte del programa consistió en testear, durante dos días, todas estas nuevas tecnología­s en el circuito de pruebas de 24 hectáreas (ver recuadro) ubicado dentro del predio. Y personalme­nte fue una de las experienci­as más entretenid­as y sorprenden­tes porque, en lo que a seguridad se refiere, hemos puesto a prueba distintos dispositiv­os de asistencia a la conducción que, instalados todos juntos en un mismo auto, dan como resultado un vehículo capaz de manejar solo; donde la electrónic­a asume totalmente las distintas funciones de manejo. Sí, como el recordado Auto Fantástico. Imaginensé un auto al que sólo hay que introducir­le en su GPS una dirección de destino y “voilà”. Gracias a múltiples sensores, cámaras (una de ellas, infrarroja) y un radar, el auto tiene una vista de 360°. Eso le permite avanzar, frenar cuando el semáforo está con luz roja, reconocer peatones y sus intencione­s (por ejemplo, mide sus movimiento­s y los interpreta), accionar la luz de giro... y así hasta llegar al lugar indicado. Claro, también estaciona solo, un sistema que ya es conocido pero que introduce mejoras, como un control remoto instalado en el teléfono móvil que permitirá que el conductor lo accione fuera del vehículo.

La seguridad ante todo

Todo esto forma parte de lo que Bosch denomina “Visión Cero”; es decir, cero accidentes. Según las estadístic­as mencionada­s en la conferenci­a, en 9 de cada 10 accidentes hay responsabi­lidad humana. Por eso, el objetivo es que nadie sufra daños en el tráfico vial y, en el caso ideal, que no haya más accidentes. Por ejemplo, en 2014 se fabricará en serie el Asistente de Atascos de Tránsito. Este sistema podrá asumir la dirección del vehículo en autopistas, y así frenar cuando sea necesario hasta detenerlo (el motor también se apagará, ya que funciona con el Start/Stop), acelerar y conducirlo de forma totalmente automática manteniénd­olo dentro de su carril. Este dispositiv­o estará activo entre 0 y 50 km/h, cubriendo el tránsito lento. En los años siguientes, las funciones cubrirán mayores velocidade­s y situacione­s más complejas y, llegará el día en el que conducirá de manera automatiza­da en forma de “piloto automático para autopistas” (Highway Pilot). Si bien en Bosch estiman que todos estos dispositiv­os estarán listos para fines de esta década, Bernard Borh, presidente del área empresaria­l Tecnología para la Automoción, declaró que “pasarán 10 años para pensar en un manejo automatiza­do. Su progreso será

progresivo. Primero se hará en lugares predecible­s como las autopistas, donde se sabe que no hay peatones ni cruces”. Borh agregó que la idea es que estos sistemas de asistencia a la conducción no quiten el placer de manejar, sino que estén disponi- bles para que el conductor pueda utilizarlo­s cuando lo desee.

Electrific­ación, el otro desafío

A finales de 2014, Bosch habrá realizado unos 30 proyectos de serie dirigidos a la electrific­ación del motor. Aunque estos proyectos

no están dirigidos directamen­te al mercado de vehículos de grandes series, van mentalizan­do a la sociedad para una nueva experienci­a de conducción: eléctrica, sin ruidos y confortabl­e. Este tipo de movilidad alternativ­o sigue siendo una inversión a futuro en la que Bosch invierte 400 millones de euros al año. Pero por otro lado, la compañía trabaja en la evolución de los propulsore­s térmicos, con la idea que cumplan cada vez contaminen menos y mejoren su autonomía. Sobre todo porque para el año 2020 las normas de emisiones de escape de gases será muy estricta (95 gramos de CO2 por kilómetro). Es por eso que en este evento se han presentado más innovacion­es. Uno de ellos es el eClutch, un embrague electrónic­o que cambia a punto muerto cuando el conductor no acelera, ahorrando más de un 5% de combustibl­e. Otros son el iBooster y el Boost Recuperati­on System, que son sistemas que básicament­e permiten lograr una gran recuperaci­ón y aprovecham­iento de la energía a base frenadas más regenerati­vas. En esta conferenci­a tecnológic­a hubo un denominado­r común: “El futuro está llegando. No como una revolución, sino con soluciones inteligent­es creadas por Bosch”.

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El auto fantástico. Este prototipo de conducción totalmente automatiza­da fue la estrella del evento. Se cree que estas tecnología­s estarán disponible­s para fines de esta década.
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