A fondo por Hockenheim y sin piloto
En el circuito alemán, Audi hizo girar a toda velocidad un RS7 con sistema de conducción autónoma.
D esde hace un par de años que se viene hablando mucho de la conducción autónoma de los vehículos. Y el avance en el desarrollo de esta tecnología es sorprendente. Pero Audi acaba de lograr algo que hasta hace poco parecía increíble. Hizo circular a fondo un automóvil por un circuito sin nadie al volante. El vehículo fue un RS7 que dio una vuelta en Hockenheim lanzado a toda velocidad durante el fin de semana de cierre de tem- porada de la categoría de Turismo alemana. El coche anduvo realizando las trayectorias ideales para lograr ir lo más rápido posible, doblando la dirección y realizando los cambios por sí mismo, siempre controlado por una computadora autónoma. El RS7 estuvo regido por una computadora programada con un software preparado especialmente. Así, usaba la información que tenía cargada de antemano pero también era capaz de responder a los estímulos que le venían desde el entorno, como las curvas. Para orientarse en la pista, el sistema usó señales de GPS corregidas, más detalladas que las usuales. Esos datos eran transmitidos al vehículo vía Wi-Fi y también por señales de radio de alta frecuencia. Al mismo tiempo, unas cámaras 3D iban “observando” el paisaje del circuito e iban comparando las imágenes que disponía previamente. De esa manera, el auto fue capaz de estar orientado en la pista con una precisión de centímetros, lo que le permitió pisar los pianitos y aprovechar todo el asfalto disponible de la pista. Lo que sucedió en Hockenheim es llevar capacidad del auto al límite, pero también da la idea de que estamos ante una tecnología que no resultaría imposible de aplicar en autos de producción.