Varias opciones, la misma calidad
Se construirá en versiones furgón y de pasajeros. Y podrá tener tracción trasera o delantera, y motor nafta o turbodiésel.
C on motivo de una nueva edición del Salón Internacional de Vehículos Comerciales, también conocido como IAA, con sede en la ciudad alemana de Hannover, MercedesBenz infló el pecho para el lanzamiento de su nueva Vito. Y la onda expansiva de esa novedad llega y llegará a nuestro país. Porque esta van o monovolumen mediano se va a fabricar también en Argentina, en el Centro Industrial Juan Manuel Fangio, el complejo que la marca germana tiene en Virrey del Pino, partido de La Matanza. El inicio de la producción está previsto para julio de 2015 y, su lanzamiento comercial, para noviembre del mismo año. Para ese momento, se habrán invertido los 170 millones de dólares que la firma anunció para este proyecto en 2012, una cifra muy importante que no sólo es inyectada en todo el circuito productivo dentro de la fábrica, sino que además contempla el desarrollo de proveez dores nacionales para alcanzar el porcentaje previsto de contenido local en cada unidad, que serrá de un 25% a un 50%, dependiendo del tipo de carrocería, ya que los vehículos de pasajeros son los que más aportan en este sentido. Un dato más. En el apartado industrial, Mercedes-Benz planea fabricar 9.000 unidades de Vito por año en Argentina, lo que implicarán unos 500 puestos más de trabajo en la planta, que se suman a los 2.000 actuales. El 70% de ese total será exportado, principalmente a Brasil, pero también a otros mercados latinoamericanos. Para nuestro país, Mercedes-Benz anunció que fabricará tres tipos de carrocería: Furgón, con una capacidad de carga de 1.369 kilos y lugar para tres pasajeros; Fur gón mixto, con un formato 4+1 y espacio para carga; y Tourer, con capacidad hasta para 12 pasajeros. En cualquiera de esos casos, la nueva Vito medirá 5.140 mm de largo, con una distancia entre de 3.200 mm.
Otra de las grandes novedades que aporta esta nueva Vito es su dualidad para contar con tracción delantera o trasera, incluso en Europa anuncian una tracción integral para el 2015. Aquí, para la tracción delantera, disponible para furgones o combis, se utiliza-
rá el motor turbodiésel de 4 cilindros, 1.6 litros y 114 CV (producto de una alianza global con Renault). Por su parte, para la tracción trasera, sólo en combis, se usará un naftero 2.0 de 185 CV. Una buena percepción de lo que Mercedes-Benz logró con este vehículo la pudimos obtener en la jornada de pruebas que se realizó en los alrededores de la planta de Vitoria, en la región del País Vasco, España. Es “la casa” de la Vito, incluso le da las primeras cuatro letras de su nombre a este modelo alemán. De allí, unas 120.000 unidades salen por año y, detrás de la de Dusseldorf, es la factoría más importante de furgones de la compañía. También se produce en Francia, Rusia, China y en una planta de ensamble en los Estados Unidos. Manejamos versiones de pasajeros y de carga, y en todas nos sorprendió su muy buen nivel de insonorización. A nivel de confort, tiene todo lo que una marca como Mercedes-Benz suele ofrecer, más allá de que los plásticos de la plancha frontal son rígidos y no mullidos (inyectados). Para la versión furgón son más que suficientes, pero para la Tourer, la más lujosa de pasajeros, perecen poco adecuados. La comodidad en cualquiera de sus asientos y la po- sición de manejo en el mando del conductor invitan a disfrutar de su andar. En marcha es sólida y confortable, tanto para la ruta como para la ciudad, incluso la versión furgón, que lógicamente tiene suspensiones algo más “duritas” para tolerar carga. Respecto del motor turbodiésel, si uno se guiara por la cilindrada, un 1.6 daría la impresión de ser algo chico para un vehículo de este porte y, sin embargo, es notable su respuesta debido al excelente escalonamiento de las relaciones de caja de seis marchas. Y encima gasta poco.