Declarar el transporte en estado de emergencia
Es el pedido de la cámara que agrupa a las empresas de transporte de cargas ante la inviabilidad del negocio del flete en la Argentina.
La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) expresa en un comunicado su preocupación por la crisis que atraviesa el sector, y le pide al gobierno nacional declarar en estado de emergencia a esta actividad, que es vital en el desarrollo económico del país.
Sucede que desde octubre del año pasado, el combustible aumentó más del 40 %, y ese insumo representa el 35 % del costo operativo del transportista. Y a eso hay que sumarle el incremento de costos, por ejemplo, en neumáticos y lubricantes, más la notable suba de los peajes.
Según Juan Aguilar, secretario de relaciones institucionales y prensa de FADEEAC, el negocio del flete de media y larga distancia está perdiendo rentabilidad en el país desde hace cuatro años, pero ahora la situación se tornó insostenible. Porque, además, la presión tributaria también es alta: el 41 % del precio que un cliente paga por un flete se lo lleva el estado en impuestos.
Y hay algo aún más preocupante, porque debido al crecimiento de las tasas de interés, la financiación para poder renovar la flota de camiones es casi imposible, por lo que la calidad del parque móvil es cada vez menor: hoy hay alrededor de 600 mil camiones realizando fletes en el país, de los cuales cerca de 150 mil tienen más de 30 años de antigüedad. Esas unidades circulantes representan no sólo un riesgo para la seguridad vial, debido a la falta de asistencias electrónicas a la conducción, como los frenos ABS o los controles de tracción y estabilidad, sino que además consumen más combustible y contaminan más.
“Todo lo que decide el estado –declara Juan Aguilar– es lo que nos está perjudicando: política energética, precios de peajes, tasa de interés e impuestos”.w