El auto con “alas” que cautivó con su diseño de vanguardia
Su original estilo lo diferenció de sus rivales. Se fabricó en San Justo y se vendió entre 1962 y 1968.
La década del 60 marcó el gran desembarco de los compactos americanos y el afianzamiento de una industria automotriz joven y pujante que llevaba un poco más de un lustro construyendo vehículos en el país.
Al igual que Ford Falcon y el Chevrolet 400, el Valiant fue el primer auto fabricado a gran escala por Chrysler Argentina. A ese lote de compactos también se sumó el Rambler, aunque IKA ya había construido otros autos previamente.
El Valiant comenzó a fabricarse en la planta de San Justo a fines de diciembre de 1961, pero recién llegó a los concesionarios en abril de 1962.
Su diseño lo diferenció del resto, aunque a partir de su tercera generación cambió por completo, amoldando su innovadora figura a un estilo más sobrio y refinado.
El Valiant se vendió entre 1962 y 1968. A lo largo de ese periodo se lanzaron cuatro generaciones que tuvieron una gran aceptación debido a su bajo costo de mantenimiento, confort y habitabilidad.
Industria nacional
Chrysler siempre fue el tercero en discordia en la industria automotriz estadounidense. Y acá no quiso ser menos. Por eso, ante los lanzamientos del Ford Falcon y el Chevrolet 400, la marca lanzó el Valiant V200.
El modelo llegó a nuestro país en 1961, en un comienzo como importado, pero después comenzó a armarse acá a partir de piezas importadas (estampado en los EE.UU. y construcción en la planta de San Justo), como paso previo a la total nacionalización posterior.
Es un auto que entró por los ojos debido al innovador diseño de la carrocería. Sus “aletas” tan características por encima de los guardabarros delanteros y traseros, redondeaban una personalidad única que no tenía ninguno de sus rivales.
Medía 4.678 mm de largo y tenía una distancia entre ejes de 2.705 mm,
dimensiones suficientes para permitir que en sus asientos enterizos viajen hasta seis pasajeros.
Su fórmula mecánica estaba compuesta por el motor de seis cilindros Slant Six 170 (medida en pulgadas cú
bicas que equivale a 2.790 cm3), que entregaba una potencia de 101 HP.
Si bien era uno de los menos potentes del segmento, el propulsor era rendidor, porque empujaba al Valiant a una aceleración de 0 a 100 km/h en poco más de 15 segundos. Hay que tener en cuenta que la transmisión era de tres marchas y que rondaba los 1.200 kg de peso.
Pese a todo, el V200 se las arreglaba muy bien para rozar el límite de los 150 km/h, una velocidad nada despreciable por aquellos años, aunque para detenerlo había que contemplar una distancia apreciable, quizás por sus frenos de tambor.
A un año y medio de su lanzamiento, y ocupando el cuatro lugar (6.305 unidades) detrás del Rambler, el Falcon y el Chevrolet 400, la marca lanzó el una actualización que casi no presentaba cambios estéticos, pero que sí evolucionaba en materia mecánica. Gracias a la incorporación del motor de 3.687 cm3 y 137 HP, el Valiant se convirtió en el que auto más potente del mercado. Y esa propaganda, sumada a sus otros atributos, le permitieron crecer en ventas.
A pesar de los buenos resultados de la segunda generación, la marca debió aumentar el porcentaje de piezas nacionales. Para ello debía estampar partes de la carrocería que hasta ese entonces se importaban.
Como resultado, Chrysler Argentina decidió diseñar y producir la carrocería de un modelo que recientemente había sido lanzado en los Estados Unidos: el Dodge Dart 270, que aquí se denominó
Esta nueva generación, presentada apenas un año después de lanzarse el Valiant II, aparecería con un rediseño total, alejándose de las líneas modernas de los modelos anteriores –se eliminaron las aletas en los guardabarros al tipo Chevrolet Impala- y con un estilo más conservador.
Otro cambio importante fue que creció en todo sentido, llegando a los casi 5 metros de largo (4.976 mm) y convirtiéndose en el auto más largo del momento, superando por 5 centímetros al Rambler (en 1965 volvió a ser el más largo).
En mayo de 1966 se presentó en la planta de San Justo la cuarta generación de este modelo que presentaba algunas diferencias estéticas respecto de su antecesor.
El 94% de las piezas del eran nacionales. En 1967 se presentó una nueva línea, que se ofrecía con seis nuevos colores de pintura metalizada y nuevos tapizados, entre los detalles más importantes. En cuanto a la mecánica, el motor recibió modificaciones que permitieron aumentar su potencia a 145 HP (SAE).
Finalmente, en 1968 el Valiant se despidió de las líneas de producción de San Justo para abrirle camino a la nueva era Dodge, la línea que vio nacer a las recordadas cupés GTX y Polara RT. ■
Valiant II, Valiant III. Valiant IV