Cómo cuidar la pileta en un verano lluvioso
Es fundamental controlar los niveles de pH y de cloro. Además, conviene intensificar las horas de filtrado.
En este verano donde las lluvias están presentes cada dos o tres días, además de generar malestar entre los que aman el calor o están de vacaciones, es necesario dedicar más atención al cuidado de la pileta.
“En época de lluvias lo más importante es regular el pH del agua, que suele aumentar y habitualmente la gente lo confunde con falta de cloro”, explica Luciano Crisci, de la firma Piletas Crisci y agrega que “para medir los niveles de pH y, también, de cloro se venden kits de laboratorio (cuestan entre $ 350 y $ 400) que permiten en pocos segundos conocer los valores y actuar en consecuencia incorporando reguladores de pH”.
El nivel de pH es la medida de acidez o alcalinidad del agua de la pileta. Cuando el pH del agua disminuye, aumenta la concentración de iones de hidrógeno y se forma más ácido hipocloroso aumentando así la capacidad de desinfección. En cambio, cuando el pH del agua aumenta, baja la concentración de iones de hidrógeno, se forma más iones hipocloritos y la capacidad de desinfección disminuye.
¿Cuáles son los valores óptimos del pH? “Se deben mantener entre 7,2 y 7,4, cifras efectivas y seguras para llevar a cabo una cloración, ya que tendremos un buen nivel de ácido hipocloroso que se encargará de destruir microorganismos indeseados sin llegar a ser nocivo para nuestra salud (irritación de ojos, por ejemplo) ni para los elementos de la piscina”, dice Crisci y resalta que “no sólo se cuida la pileta sino que también el bolsillo”.
Otra opción para implementar luego de la lluvia es aplicar un shock de filtrado y de cloro. Martín Ianniruberto, de Piscinas Santa Clara, sugiere “realizar un filtrado intensivo, por ejemplo, en el horario de 19 a 23, lo que permitirá recuperar el agua rápidamente”.
Ésto se puede aplicar también un día que la pileta se utiliza mucho.
En cuanto al uso de cobertores o cubre pileta, Ianniruberto advierte que “en esta época hay que estar muy atentos porque por el calor pueden acelerar el proceso bacteriano y, además, es incómodo estar poniendo y sacándolo. En general, se utilizan cuando termina la temporada”.
De todo modos y más allá de la lluvia la pileta requiere cuidados todos los días y durante todo el año aunque en otoño e invierno el mantenimiento es más espaciado.
“En verano es conveniente segmentar el filtrado del agua, lo ideal es filtrar una hora cada dos horas de uso”, dice Ianniruberto e inmediatamente agrega que “se puede adaptar a las preferencias del usuario, si no le gusta filtrar mientras hay personas bañándose en la pileta o de noche por