Los inversores miran al Este
DESARROLLOS EN URUGUAY
Desarrolladores uruguayos y argentinos explican por qué conviene invertir en el país vecino.
Las elecciones presidenciales del 27 de octubre abrieron en Uruguay un escenario de balotaje y la posibilidad concreta de un cambio de signo político. Sin embargo, esta perspectiva no logró frenar el ritmo de su mercado inmobiliario durante el primer semestre. Un país vecino (Argentina) con inversores que huyen de una economía convulsionada, tasas de interés bajas y leyes que promueven la construcción de viviendas son los factores que impulsan las operaciones de compra venta en Montevideo y Punta del Este, especialmente.
Vitrium Capital, por caso, es una empresa argentina que lanzó hace unas semanas su quinto proyecto en la capital uruguaya. Se trata de 01 Libertador, una torre de 11 pisos, 78 departamentos de 2, 3 y 4 ambientes con expansiones, planta baja comercial, 40 garajes en planta baja y subsuelo, 2 ascensores y una terraza con vistas a la bahía y al cerro de Montevideo. Además, el edificio contará con un área de amenities que ofrecerá espacios de coworking, mirador, parrillas, sum, lavadero y estacionamiento para bicicletas.
Por su parte, la desarrolladora destaca que otra ventaja del proyecto es su correspondencia con la Ley de Vivienda Promovida, lo que implica la exoneración de impuestos ITP, de IRAE/IRPF, a las rentas generadas de los alquileres por 10 años y del IP por 10 años. “Además del inversor uruguayo, este proyecto se presenta como una oportunidad para el público argentino. Cercanía, estabilidad financiera y renta fija en dólares son algunas de las ventajas que se desprenden de 01 Libertador”, asegura
Ricardo Mataloni, Director Comercial de Vitrium Capital.
Por su parte, la comercializadora Uruguaya Amarras presentó El Escondido, en Punta del Este, un complejo residencial “que combina la posibilidad de uso propio y la generación de renta variable”, asegura esta empresa.
En La Barra y frente al mar se construirán dos plantas con 18 suites de una y dos habitaciones totalmente amuebladas y equipadas y una moderna recepción en planta baja integrada al Lounge & Beach Bar y la extensión hacia el deck, la piscina y la playa privada. “Las unidades se escrituran a nombre propio y se ceden por un período inicial de diez años al gerenciador hotelero para que éste las administre y de esa forma le genere una renta a los dueños de las suites”, señala Gustavo Pereira, titular de Amarras. El Escondido no ofrece restricciones de uso durante todo el año; cada dueño decide cuándo usar su unidad, y cuándo cederla a la explotación hotelera. “Si bien la flexibilidad de uso se mantiene, a menor uso mayor rentabilidad. La carga de expensas mensuales, o la liquidación de la renta dependerá de la ocupación que cada dueño quiera darle a su unidad”, explica Pereira. Según éste, la rentabilidad se calcula alrededor del 8% anual en dólares para departamentos con valores que parten de los 155 mil dólares con una financiación que se compone de un 35% al contado y el saldo restante en 20 cuotas fijas mensuales.
Con proyecto del estudio Martín Gómez Arquitectos, se estima que la entrega de El Escondido se concretará a comienzos de 2021.
Amarras es también la responsable de la comercialización de Renaissance, emplazado en la Ciudad Vieja de Montevideo.“El edificio Renaissance, como su nombre lo indica, busca renacer un edificio histórico que data de 1896 resaltando sus cualidades y respetando su historia. En su proyección se tuvieron en cuenta las necesidades del mercado emergente existente, brindando practicidad y funcionalidad en cada uno de sus ambientes, sin comprometer la calidad y el diseño, en el que cada detalle mantiene el nivel proyectado”, señala Pereira.
El emprendimiento transforma el edificio histórico en un basamento y elemento de transición de dos torres paralelas de 8 pisos, un subsuelo y terrazas que conforman el volumen edificable, lo que habilita a un diálogo de respeto entre la antigua edificación y la más reciente. Este proyecto ofrece 34 departamentos de uno y dos dormitorios, 18 cocheras y un local comercial. Cada unidad cuenta con parrilla y terraza propia. La intención fue concebir departamentos que tuvieran las virtudes de una casa, e incluye un salón de usos múltiples con terraza. Las unidades se venden desde los 88.600 dólares y pueden pagarse con una financiación de un 30% al contado y el saldo restante en 24 cuotas fijas.