Almirante fue un campo de batalla: partido suspendido y 23 detenidos
Hubo enfrentamientos entre facciones rivales dentro y fuera del estadio. Hay dos barras de River apresados.
En Isidro Casanova se vivió otra tarde violenta que terminó con la suspensión del encuentro que estaban jugando Almirante Brown y Talleres de Remedios de Escalada en el marco de la 35ª fecha de la Primera B. ¿Qué pasó? Un nuevo capítulo de la interna entre las facciones de la barra del equipo de La Matanza que conviven en el club. Ayer, lo que se dio fue un feroz enfrentamiento entre “La Banda Mostro” (sic) contra el grupo de “La Justina” y “Los de Siempre”, en la esquina de Rucci y Mármol, en el acceso de la cabecera Norte del estadio Fragata Sarmiento. Eso derivó en un choque con la Policía Bonaerense que culminó con 23 detenidos (13 tienen entre 18 y 41 años) y algunos heridos leves. A 300 metros hubo otro foco de conflicto entre barras y la policía, donde detuvieron a 4 hinchas con armas de fuego y armas blancas. Fue herido un efectivo policial por un cascotazo en la cabeza. El fiscal Quiroga ordenó las detenciones por “atentado y resistencia a la autoridad”. El titular de la APreViDe, Juan Manuel Lugones, quien había ido a ver el partido y supervisar el operativo, debió irse custodiado porque intentaron agredirlo cuando lo reconocieron. El funcionario es reconocido simpatizante del club Nueva Chicago y desde hace tiempo viene lidiando con la violencia que envuelve al club aurinegro.
“Los problemas se dieron en la tribuna, en el marco de la interna de la barra. Tomé la decisión de suspender el partido y vamos a ser muy severos con Brown. Los detenidos tendrán prohibición de concurrencia y le pediremos al Ministerio de Seguridad de la Nación que se les prohíba ingresar a todas las canchas del país. El que las hace, las va a pagar”, expresó Lugones a través de un comunicado. Luego, adelantó que “Almirante no va a jugar de local en su estadio por mucho tiempo”. Entre las 23 personas detenidas se identificó a dos barras de River que pertenecen a La Banda del Oeste, el grupo que le disputa el poder a Los Borrachos del Tablón en el club de Núñez.
“No aprendemos más, no hay explicación para estas cosas. Es una pena, porque venimos a jugar un partido. Hablé con Lugones en el campo de juego y también con el Jefe del operativo, pero no estaban dadas las garantías para continuar. Si seguíamos el partido, después no sabés con lo que te podés encontrar. Hubo un momento en el que era todo una locura: tiraron gases lacrimógenos, se escuchaban balazos, no se podía seguir”, describió el árbitro José Carreras, quien confirmó que el partido se suspendió a los 13 minutos.
Los jugadores de ambos equipos tenían familiares en las tribunas y por el caos y los gases debieron llevarlos hasta la zona de vestuarios. “Hay gente de seguridad, controles con huella digital, está la Policía necesaria e igual hacen todo esto que perjudica a la institución. ¿Qué tenemos que hacer? ¿Hay que discriminar? Uno no quiere hacerlo, pero todos estos hechos perjudican al socio que quiere lo mejor para el club. Estamos muy mal”, se lamentó Antonio Argento, presidente del club.