Clarín - Deportivo

Boca buscó hasta el final y gritó fuerte en el descuento

Terminó con cuatro puntas en Tucumán. Bou igualó a los 91’. Le lleva seis puntos a Talleres, primer rival luego del receso.

- Matías Bustos Milla mbmilla@clarin.com

El merecido gol agónico en Tucumán le permitió a Boca descomprim­ir muchas de las tensiones que acumuló en las horas posteriore­s a la dolorosa derrota de la Superfinal. La caída hubiese sido injusta pero también otro golpe que habilitarí­a una especulaci­ón atrás de otra, como las que hubo después de la visita de Daniel Angelici al plantel. Nada de lo que se expuso con precisión quirúrgica de esa reunión fue real, más allá de enojos y reproches. Por eso el gol de Bou, el primero desde diciembre de 2016, fue más que el empate en un terreno complicado donde Boca luchó sin mostrar efectos anímicos de lo que pasó en Mendoza. El 1- 1 también mantuvo a dos partidos de distancia a Talleres, su principal perseguido­r y su próximo rival. “Siempre hay que hacer una novela en Boca, no saben hacer otra cosa... Vivimos en una sociedad bastante complicada, nosotros estamos muy tranquilos, trabajando en paz en el vestuario. Nos dolió perder la final pero había que levantar la cabeza y sacarlo adelante. Merecimos ganar, pero el empate al menos fue un premio a todo el esfuerzo que hicimos”, expuso el capitán Pablo Pérez, uno de los más castigados tras la Supercopa. El rosarino, molesto, elevó el tono de su discurso: “No sé lo que habrán hablado afuera, segurament­e boludeces como siempre... Lo que se dijo no pasó. Hay que seguir laburando, nos levantamos a las 6 de la mañana todos los dias para entrenar. Acá no hay pelea, el hincha tiene que saber que estamos bien y que habrá un gran sacrificio”. Como contó Clarín, la voz de los protagonis­tas minimizó un episodio que se agigantó entre versiones que también salieron desde el club. El presidente no viajó a Tucumán con el plantel.

Guillermo también le puso voz a esa situación: “Lo que se dijo no pasó, entonces no puedo opinar... El presidente a veces viene y otras no. Cuando pierde Boca obviamente que esto trae cola, pero somos inteligent­es. Saldrán noticias que no son reales y a nosotros no nos puede generar nada que no sea trabajar, mejorar, ganar y dar una buena imagen”.

Lo que se le viene a Boca es una final anticipada del torneo. Será frente a Talleres en Brandsen 805 después del receso por la fecha FIFA, que tendrá al equipo del Mellizo con varios jugadores afectados a sus respectiva­s seleccione­s. Un encuentro “para mantener la distancia o estirarla con los que vienen atrás. Quedan siete fechas para cumplir con el objetivo que nos trazamos”, avisó Guillermo, quien decidió sacar Tevez en el final del partido para poner a Buffarini, en un cambio lógico por lo desbalance­a- da que había quedado la última línea con las salidas de Jara y Mas. También se hablará de esa modificaci­ón, por más que haya estado bien. El gran acierto del Mellizo con el ingreso de Bebelo Reynoso también quedará en segundo plano, porque en Boca todavía resuenan ecos de una final perdida. Aunque sea un líder eterno del fútbol argentino y haya mostrado la rebeldía que se necesita para ir a dar vuelta un resultado de visitante.

“Desde el punto de vista que generó ese resultado del miércoles puede que le haya dado valor Daniel Angelici a su visita. Desde mi punto de vista, no. Porque a veces está y otras no, pero justo coincidió con la derrota. Lo que hablamos fue de lo que nos tocó perder y del futuro del campeonato, nada más”, sentenció el Mellizo, acallando voces que insistían con un tema al que sólo le falta una palabra: la del presidente. Sólo así se cerrará un círculo de desconfian­za que amenazó con hacer volar todo por el aire pero que se disipó como el humo de los fuegos artificial­es que se tiraron en el José Fierro tras el empate.

Tras el juego, Carlos Tevez se fue sin hablar. En otro flojo encuentro del Apache (pese a que en la primera etapa asistió a dos compañeros) mostró que su nivel no depende del sitio en el que juegue, porque ayer tuvo a su amigo Wanchope Ábila al lado.

En las próximas semanas se debatirá: ¿Tevez tiene que sentarse en el banco para que vuelva Cardona a la titularida­d? ¿Reynoso tiene que estar en el once inicial frente a su ex club? Preguntas futboleras que sin ese gol de Bou no existirían.

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TÉLAM Apenas gotas de talento. Tevez, en posición de enganche, tuvo un par de intervenci­ones de jerarquía, sin continuida­d. El equipo lo necesita protagonis­ta durante más tiempo.

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