Tirante será el 1 del mundo tras ganar el Orange Bowl
El futuro del tenis argentino parece estar asegurado. Thiago Tirante, un platense de 18 años, se adjudicó el tradicional Orange Bowl de Miami al derrotar a Juan Bautista Torres por 6-0 y 6-3 y terminará la temporada como número 1 del mundo en el ranking junior. Es el tercer título consecutivo que consigue Tirante luego de obtener la Copa Yucatán y el Torneo Eddie Herr (también había superado en la final a otro argentino, Román Burruchaga). Y acumula 18 triunfos consecutivos y lleva ganados 26 sets seguidos.
No es la primera vez que un argentino termina el año como número 1 en la categoría, pero son pocos los que alcanzaron ese privilegio. Hace dos años lo consiguió Axel Geller. Y después, en varones, hay que remontarse a 1994 con Federico Browne y a 1995 con Mariano Zabaleta. Guillermo Coria (en 2000), Brian Dabul (2002) y Sebastián Báez (2018) fueron número 1 pero de manera temporal. En mujeres la última fue María Emilia Salerni, en 2000. Más atrás en el tiempo hay que remontarse a Gabriela Sabatini (1984), Patricia Tarabini (1986), Cristina Tessi (1988) y Florencia Labat (1989).
Tampoco es la primera vez que un argentino gana el prestigioso Orange Bowl. En Sub 18, Roberto Argüello lo hizo en 1981, Fernando Meligeni (después se nacionalizó brasileño) en 1989, Marcelo Charpentier en 1991 y Zabaleta en 1995. Fueron finalistas Carlos Castellán, Gastón Etlis, Juan Mónaco y Guillermo Coria. A Coria, en 1998, lo venció Roger Federer. Curiosamente hay, de alguna manera, un vínculo entre Tirante y el suizo. Es que a Tirante lo apoya - desde Australia 2018- Team8, la agencia de representación de deportistas creada y liderada por Federer y Tony Godsick. Y con Juan Martín Del Potro comparten representante: Chris Jackman.
Igualmente no todo fue mágico en Tirante en los últimos tiempos. Durante la Copa Yucatán falleció su abuela paterna, Graciela. Pero ese dolor lo transformó en su fortaleza. Y desde ahí no perdió más. Por eso después de cada partido el triunfo se lo dedica a ella. Seguramente hará lo mismo con el 1. ■