Histórica consagración de Los Angeles Lakers en la NBA
El equipo de LeBron James se quedó con la serie frente a Miami Heat por 4 a 2, tras un aplastante 106-93.
Los Angeles Lakers y LeBron James festejaron un triunfo histórico en las finales de la NBA: le ganaron a Miami Heat por 106 a 93 en el sexto partido, liquidaron la serie 4 a 2 y se consagraron campeones. Es el 17° título para la franquicia del estado de California, que igualó así a su rival de toda la vida, Boston Celtics, como los máximos campeones. James -con un triple-doble de 28 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias- fue elegido como el MVP de las finales en su cuarto título y así se ubica a dos de esos premios y a dos campeonatos de Michael Jordan, quien ganó 6 con Chicago Bulls.
El conjunto púrpura y dorado recuperó la gloria después de una década -la mayor sequía de su historia: su último título había sido en 2010 y de la mano nada menos que del legendario y trágicamente fallecido este año Kobe Bryant.
En el sexto juego en la burbuja de Disney, de la mano de James y Anthony Davis, los de Frank Vogel se fueron en ventaja tras los primeros 10 minutos por 28-20, aprovechando un parcial de 11-4 en los últimos 3 minutos. Todo el Heat pareció sentir la carga de partidos de Butler (que descansó apenas 48 segundos en el partido anterior y promediaba casi 45 minutos por noche sobre 48 posibles) y el segundo cuarto, lejos de achicar las diferencias, las expuso. El resultado, al entretiempo, fue 64-36.
Lejos de soltar el pie del acelerador, LeBron, de 35 años, continuó con la mira puesta en su objetivo y para el final del tercer cuarto ya bordeaba un triple-doble que lo encaminaba hacia un MVP también pretendido -y con argumentos- por Davis. Así se entró a un último cuarto con una estadística ya de por sí contundente: de las 56 ocasiones en que los Lakers empezaron los últimos 12 minutos en ventaja, ganaron... las 56. Miami continuó luchando y por primera vez en la noche arrancó un poco mejor que su rival. Fueron posiblemente el equipo que mejor juego de ataque haya regalado. Pero dicen que es la defensa la que gana los campeonatos. Y ahí los Lakers, sobre todo en esta serie y en este partido, no tuvieron parangón. Y tuvieron a LeBron James.