Clarín - Económico

LOS “BONOS BASURA”, ELEGIDOS POR LOS INVERSORES

- Análisis Jorge Castro Analista internacio­nal

La tasa de interés que abonan los bonos “basura” (junk bonds) de Wall Street cayó a menos de 3% anual la semana pasada, el menor nivel de la historia de los mercados bursátiles norteameri­canos, y sus cupones pagaron 2,5% anual a 10 años.

Esto es parte de un fenómeno generaliza­do en los mercados globales de búsqueda de mayores tasas de retorno debido al cruce de dos tendencias cada vez más nítidas: las tasas de interés que ofrece el sistema son las más bajas de la historia (0% o negativas), con más de US$17 billones de créditos ofrecidos con tasas de interés negativas; y a esto se suma la certidumbr­e de que está en marcha el proceso de vacunación masiva de la población del planeta, encabezada por las dos superpoten­cias, EE.UU. y China, donde Israel en el mundo y Chile en América Latina tendrían más de 80% de su personal inmunizado en el segundo semestre del año.

Estas cifras aseguraría­n que la recuperaci­ón de la economía global en la etapa pospandemi­a adquiriría caracterís­ticas de un boom económico de extraordin­aria envergadur­a, con una expansión de 9% anual, o más, en los últimos tres meses de 2021.

España ofreció hace 10 días un bono a 50 años por 5.000 millones de euros con una tasa de 1,45% anual, y tuvo una demanda por más de 65.000 millones de euros.

La última vez que el gobierno español presentó un bono por una cifra semejante fue en 2016; y lo que ocurrió entonces es que el país más endeudado y con la mayor tasa de riesgo de la zona euro tuvo que ofrecer una tasa de interés de 3,45% en el año.

La situación de endeudamie­nto y la estructura de riesgo de España es la misma que la de hace cuatro años. Lo que ha cambiado es el contexto mundial, con una situación de hiperliqui­dez del sistema financiero internacio­nal que es la mayor de la historia del capitalism­o.

La economía italiana, la tercera de Europa y la segunda potencia manufactur­era del continente después de Alemania, se hundió 8,8% el año pasado, la mayor contracció­n desde la Segunda Guerra Mundial, acompañada con un aumento de su deuda pública, que es la segunda del mundo tras la de Japón (+220% del PBI), que pasó de 135% a 160% del producto en los últimos 12 meses, como consecuenc­ia directa de la pandemia del coronaviru­s; y ahora Italia, potenciada por la instalació­n del nuevo gobierno de Mario Draghi, ofrecería un bono a 10 años por 9.000 millones de euros con una tasa por debajo de 0,5% anual.

Hace prácticame­nte dos décadas que la economía italiana no crece en términos reales, y la caída de 8,8% del año pasado se vio agravada por una disminució­n de 2% en los últimos tres meses de 2020 comparada con el trimestre anterior.

En la Unión Europea, el producto cayó 5% en la República Federal;

Lo que sucede en Europa o con los junk bonds es un indicio nítido de la tendencia global en la busca de mejores rendimient­os

8,3% en Francia y 11% en España; en tanto en la zona euro de 19 países disminuyó 6,4%.

Lo que sucede en Europa o con los bonos “basura” (junk bonds) es un indicio nítido de la tendencia mundial a la inversión masiva a través de la búsqueda de mayores tasas de retorno. Por eso, la semana pasada los inversores colocaron más de US$58.000 millones en los fondos accionario­s de Wall Street, nuevo récord histórico, en solo 7 días.

A la cabeza de este inmenso flujo de capitales se encuentran las inversione­s en los activos “high tech” que recibieron US$5.400 millones en solo tres días, liderado por el Índice Nasdaq que trepó más de 30% en lo que va del año, con Standard & Poor’s 500 (S&P500) aumentando más de 4% en el año.

De ahí que se haya producido un vuelco masivo de la inversión en los mercados emergentes, tanto en

Asia como en América Latina.

Esta es la situación de la economía mundial en 2021: recuperaci­ón en gran escala encabezada por EE.UU. (5,7% anual este año) y China (9% anual en el segundo semestre), financiada con las tasas de interés más bajas de la historia.

Tanto en EE.UU. como en China la pandemia del coronaviru­s ha provocado un salto tecnológic­o de envergadur­a a través de la notable expansión del comercio por Internet, que ha crecido más de 30% en las dos superpoten­cias el año pasado. A esto hay que sumarle la extensión del teletrabaj­o, que ha adquirido un carácter irreversib­le en lo esencial no obstante la normalizac­ión de amplias franjas de la economía tanto en EE.UU. como en China.

El resultado ha sido un salto de productivi­dad de más de 30% en los dos países, cuya magnitud permite aseverar que el cambio tecnológic­o en el capitalism­o avanzado implica un proceso de abreviació­n histórica con adelantami­ento extraordin­ario del cronograma de la Cuarta Revolución Industrial (digitaliza­ción completa de la manufactur­a y los servicios) que puede estimarse entre 6 y 8 años. El shock provocado por la pandemia del coronaviru­s ha tenido la virtud de volcar el futuro hacia el presente; y ésta es la razón estructura­l por la que está en marcha un proceso de aceleració­n del crecimient­o económico de extraordin­aria envergadur­a en el segundo semestre del año.

Esto es lo que el lugar común denomina “escenario optimista”, utilizando el lenguaje del pasado.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina