Identifican y arman un mapa con las empresas más antiguas del mundo
Longevidad. Asia y Europa tienen muchas compañías milenarias en actividad, entre ellas Kongo Gumi (578). En la Argentina, la más longeva es el Banco Provincia.
Las empresas nacen, se desarrollan, algunas se reconvierten, otras son absorbidas y la gran mayoría muere. Los estudios de demografía empresarial concluyen que esa lógica se repite en todas partes del mundo . Salvo algunos casos notables de supervivencia, como ocurre con Kongo Gumi, una pequeña firma japonesa milenaria (se fundó en el 578) y que hasta el día de hoy funciona.
Perduró 1.442 años con una especialidad nada común, la construcción de templos budistas, muchos de los cuales son íconos del Japón. Radicada en la ciudad de Osaka (participó en la edificación del Castillo de Osaka en el siglo XVI), Kongo Gumi perteneció a la misma familia durante 40 generaciones hasta 2006, cuando pasó a integrar el conglomerado Takamatsu como una unidad de negocios independiente. Hoy tiene 120 empleados, en su mayoría carpinteros adiestrados en técnicas ancestrales.
El dato forma parte de un detallado informe de Business Financing, un portal inglés especializado en finanzas, cuyo objetivo fue identificar a las compañías de mayor antigüedad de cada país, como el Banco Provincia (1822) de la Argentina. Sus autores explican que comenzaron la tarea “revisando varias fuentes en Internet y una vez que elaboramos la lista, investigamos a cada compañía para descubrir si aún estaban operativas. Si no estábamos seguros, no las incluíamos en los mapas”.
La gran mayoría de las empresas milenarias están concentradas en Asia y Europa. Aunque no se observa un patrón único de supervivencia, en su gran mayoría pertenecen a rubros que resistieron el paso de los siglos: posadas, restoranes, pubs, bodegas y casas de monedas. Incluso en el top ten figura “Ma Yu Ching’s Bucket Chicken House”, una especie de fast food que funciona en China desde 1153. ¿Sorpresa? No tanto. En Pompeya (sepultada en el año 79 por la erupción del Vesubio) acaban de descubrir un local de comida al paso.
En orden cronológico y después de Kongo Gumi aparece el St. Peter Stifts Kulinarium (abrió en 803), un restorán ubicado en Salzburgo, Austria, y que funciona en el interior de la abadía de St. Peter. La tercera es la bodega y hostería alemana Staffelter Hof Winery, inaugurada en el 862 en la ciudad de Kröv. Durante casi mil años perteneció a una abadía que vendía vinos y licores (algo tradicional) para cubrir los gastos. Dos años después, en el 864, se inaugura Monnaie de París (Fábrica de Moneda), que hoy imprime y produce euros para la Unión Europea.
La lista continúa con The Royal Mint (la Casa Real de la Moneda), en Inglaterra, que está abierta desde el 886. A diferencia de su par francés, no es una empresa pública (pertenece al Tesoro de Su Majestad) y en la actualidad suministra las libras (tanto monedas como billetes) que circulan por el país. Funcionó en distintos lugares, entre ellos la Torre de Londres, y en su momento de mayor esplendor llegó a producir dinero para unos 40 países del imperio. Su sede actual es en Gales.
Según Business Financing, el top ten lo completan Sean’s Bar (un pub irlandés del 900), la fábrica italiana de campanas Pontificia Fonderia Marinelli (1040), la cervecería belga Affligem Brewery (1074) y el molino danés Munke Molle (1135). Vale la pena aclarar que las 5 empresas de mayor trayectoria que están en actividad son japonesas. La mencionada Kongo Gumi, tres posadas: Nishiyama Onsen Keiunkan (705), Koman (717) y Hōshi Ryokan (718). Cierra la lista Genda Shigyo (771), un tradicional fabricante de papel ceremonial.
En el mapa de América, la más antigua es la Casa de Moneda de México, fundada en 1534 por el virrey Antonio de Mendoza en nombre de la corona española. En los Estados Unidos, sobresale el caso de Shirley Plantation, un rancho inaugurado en 1613 en Virginia. Hasta el día de hoy continúa funcionando como plantación.
En el sur del continente, las que más perduraron son casas de monedas. Las más antiguas que continúan operativas son las de Colombia (1621) y la de Brasil, creada en 1694 y que hoy imprime reales. En Chile, destaca el caso de FAMAE (1811), empresa que desde su creación fabrica armas para sus FF.AA. y la policía. En la Argentina, ya se dijo, Business Financing destacó al Banco Provincia. No obstante, se calcula que en el país hay alrededor de 90 empresas centenarias.
Una de ellas es la zapatería Los Angelitos (1828), la más antigua de la Capital y por la cual pasaron a comprar varios personajes ilustres, entre ellos Perón, Gardel, Borges y Soldi. Creada por Domingo Harguindeguy, inició su trayectoria como una tienda de ramos generales que ofrecía calzado, cambió de ubicación varias veces hasta que “se instaló por muchos años en el local más emblemático, en la peatonal Florida al 527”, dice Valerio Lagrotta, su dueño actual.
Hoy Los Angelitos funciona en el barrio porteño de Palermo, sobre la calle Bonpland y mantiene como tradición la producción artesanal. Lagrotta calle confiesa que su prioridad es mantener vigente una marca que el próximo 4 de abril de 2028 cumplirá 200 años de historia. “En realidad -dijo al Económico- soy médico pediatra y la medicina es mi principal fuente de ingresos. Pero Los Angelitos es parte de mi vida”, finalizó.
Otras leyendas argentinas que están en actividad son Delfino, una empresa enfocada en el comercio marítimo fundada en 1838. En el siglo XIX también surgieron Magnasco (1855), Bieckert (1860), Bagley (1864), Canale (1875), Bullrich (1867) y Aguila (1880), entre otras. Magnasco nace por impulso de tres hermanos italianos (Luis, Fortunato y José), que emigraron desde Italia y fueron pioneros en la elaboración de quesos locales, como el Goya y el Chubut.
Lo de Bagley merece destacarse: fue creada por un granjero llegado en 1862 desde los Estados Unidos, escapando de la Guerra de Secesión. Dos años después inicia su notable trayectoria como empresario. Su primer éxito fue Hesperidina, la primera marca registrada en la Argentina.