Una estrategia para preservar las herramientas
Las enfermedades respiratorias exigen un abordaje que considere las causas y persiga la sustentabilidad.
Por los sistemas de engorde a corral o feedlots pasan más de la mitad de los animales que se faenan por año a nivel nacional. El complejo respiratorio bovino, con la neumonía como expresión más grave, es la principal causa de muerte de animales en los feedlots. Representa más del 50 % en esa casuística, siendo su presentación más habitual en los primeros 35 días de encierre y, en muchos casos, se mantiene hasta el final del proceso de engorde.
El estrés juega un rol fundamental en este tipo de sistemas y explica la alta frecuencia de aparición de este cuadro clínico. Las situaciones estresantes afectan de forma negativa la barrera de inmunidad más importante de las vías aéreas superiores, generando las condiciones para que los agentes infecciosos puedan acceder con relativa facilidad al pulmón y generar el daño que enferma a los animales afectando de forma importante la ganancia de peso vivo y en muchos casos, la vida de los animales.
Los agentes infecciosos que aprovechan la situación generada por el estrés y frecuentemente actúan en primer lugar son los virus, creando las condiciones para que las bacterias generen el daño grave, que en ausencia de tratamiento, provoca la muerte de los animales.
Los agentes bacterianos con mayor presentación en brotes de neumonía en nuestro país son: Mannheimia haemolytica, Pasteurella multocida e Histophilus somni y en menor medida Trueperella pyogenes. También Mycoplasma bovis es un patógeno emergente en Argentina tanto en bovinos de engorde a corral como en recrías en tambos.
La forma de minimizar la aparición de esta problemática debe basarse en tres ejes:
1- Asesoramiento veterinario permanente, orientado a generar buenas prácticas que logren el menor grado de estrés posible, incluido uno de los aspectos más importantes como es la nutrición.
2- Recurso humano capacitado y motivado en las tareas diarias.
3- La aplicación de planes sanitarios rigurosos al ingreso de los animales, basadas en la prevención con vacunas, desparasitaciones efectivas y corrección de carencias minerales.
El uso de antibióticos debe ser el más racional posible ya que la aplicación desmedida tiene consecuencias en salud pública. La elección del antibiótico es un factor clave y para ello es importante tener un historial de diagnóstico de los agentes bacterianos implicados en los casos clínicos y su correspondiente antibiograma. Esto nos ayuda a conocer la eficacia de los principios activos para los agentes comúnmente aislados de animales con neumonía.
Desde el Servicio Técnico de Biogénesis Bagó se contribuye destinando recursos para este tipo de vigilancia epidemiológica, participando de casos clínicos con el envío de muestras de animales con la enfermedad a laboratorios privados, donde se genera aislamientos de agentes y su correspondiente antibiograma, cuando existen bacterias involucradas.
Esta información generada es sumamente útil para conocer el grado de resistencia de las bacterias a las drogas comúnmente utilizadas.
La información más actualizada donde hemos participado estimulando este tipo de diagnósticos se generó mediante un convenio con INTA Marcos Juárez, en el que nos propusimos generar muchos diagnósticos en distintos feedlots comerciales para monitorear las bacterias actuantes en los casos clínicos y poder chequear la eficacia de los antibióticos.
Las bacterias que fueron aisladas son las habitualmente encontradas como causantes del complejo respiratorio bovino (Mannheimia haemolytica, Pasteurella multocida e Histophilus somni).
Los resultados de los antibiogramas efectuados para chequear la eficacia de los principios activos para esas cepas nos brindó la información lógica que la mayor proporción de resistencia (30%) se encontró en los antibióticos más utilizados para el tratamiento de neumonías en feedlots, mientras que los niveles de resistencia a Florfenicol en cepas de M. haemolytica, P. multocida e H. somni son prácticamente nulos (3%).
El Florfenicol es un antibiótico de amplio espectro, de uso exclusivo en medicina veterinaria, y una de sus principales alternativas terapéuticas es para tratar infecciones bacterianas respiratorias en bovinos y cerdos. En varios ensayos donde se efectuaron infecciones experimentales y en diversos estudios clínicos, ha demostrado ser eficaz para el tratamiento de neumonías en bovinos de engorde. El espectro de actividad incluye a los patógenos que generan neumonía. El florfenicol junto a la oxitetraciclina y tulatromicina han mostrado buenos resultados para el tratamiento de Mycoplasma bovis, un agente muy difícil de tratar, para el cuál muchos antibióticos de uso común no funcionan bien. Este antibiótico también está indicado para el tratamiento de pododermatitis, queratoconjuntivitis, diarreas y toda otra infección causada por gérmenes susceptibles al florfenicol en los bovinos.
La vigilancia epidemiológica es información para la acción, de esta manera se toma la decisión de desarrollar un producto con calidad asegurada y necesario por su alta eficacia, en un contexto de resistencia bacteriana que crece, para controlar una patología que produce severas pérdidas en la producción.
Nota de redacción: el autor es M.V del Equipo Técnico de Biogénesis Bagó.