Fertilización foliar: cuándo y por qué
Una especialista internacional detalla las claves de esta metodología y sus beneficios.
Este miércoles se llevó a cabo la segunda jornada virtual del Simposio Fertilidad 2021, dedicado a la fertilización foliar. En este sentido, Victoria Fernández, de la Universidad Politécnica de Madrid, destacó los atributos de una tecnología más conocida en cultivos intensivos, pero poco utilizada en extensivos.
La ventaja de las aplicaciones sobre las hojas “es que aportan directamente los nutrientes adonde se necesitan, aunque puede ocurrir que no siempre cause los resultados esperados, si no se toman en cuenta ciertos aspectos”, señaló la especialista. “No se trata de sustituir a la fertilización al suelo. Es una estrategia complementaria que ayuda a reducir los costos totales reduciendo el impacto ambiental”, destacó.
Fernández indicó que la fertilización foliar se recomienda cuando el suelo presenta problemas (como pH alto que limita la capacidad de absorción de la raíz), o también cuando la planta está en activo crecimiento y demanda nutrientes (mayormente a principios de la primavera, con la aparición de las hojas y la fructificación).
En tanto, enumeró una serie de sugerencias para mejorar su eficacia, citando los factores físicoquímicos de la formulación del fertilizante, la tecnología de aspersión para lo cual sugirió “sumar coadyuvantes, si es necesario” y, principalmente, los factores ambientales y el timming de las aplicaciones “buscando el momento de menor transpiración y esquivar los de mayor evaporación”
Fernández aseguró que la fertilización foliar redunda en resultados económicos positivos porque permite reducir las aplicaciones de agroquímicos y favorece la tolerancia de la planta al estrés y el comportamiento frente a plagas y enfermedades.