Retiene la corona frente a la soja pero aún no tocó el techo
En el ciclo 2020/21 la cosecha del cereal superará nuevamente a la de la oleaginosa. Sus márgenes atractivos hacen estimar una nueva suba del área este año del 5%.
“A dos meses y medio de largar la siembra maicera ya es difícil conseguir semilla”, aseguró la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en el último informe mensual de la Guía Estratégica para el Agro (GEA), pintando con esa frase el pulso de la próxima campaña. “El maíz es la estrella del año que está arrancando, ya en junio estuvimos hablando del nuevo ciclo cuando generalmente se hace en julio, el productor se ha adelantado con las compras, para nosotros es inédito”, dijo Cristian Russo, especialista de la GEA. Desde la entidad prevén un aumento del 5% en el área sembrada para 2021/2022. Así, la gramínea ocuparía 7,73 millones de hectáreas de las cuales 6,73 se destinarían a grano comercial, que a un rendimiento promedio de 8.040 kilos llevarían al récord productivo de 54 millones de toneladas.
El escenario mundial con stocks de granos históricamente bajos, precios de los commodities agrícolas inesperadamente altos y dudas sobre la cosecha que pueda lograr Estados Unidos ante la escasez de lluvias, constituye un incentivo para que Argentina incremente el área sembrada total y de maíz en particular. Sin embargo, “habrá que ver qué sucede con el clima porque los pronósticos ya alertan la posibilidad de Niña hacia la primavera y otra campaña con lluvias menores a lo normal”, advirtió el Lic. Agustín Tejeda, economista jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA). A la hora de tomar decisiones, en su opinión “lo que va a marcar la diferencia para el productor argentino son sus expectativas en cuanto a las políticas agropecuarias y a las dificultades en la macroeconomía, y cuánto se anime a aprovechar estos precios e invertir en la nueva campaña”.
Revalida el título. Aunque todavía resta por cosechar poco menos de la mitad de los lotes de maíz, las estimaciones de producción a nivel nacional de la BCR se mantienen en 50 millones de toneladas, considerando un rinde medio de 78,6 qq/ha y un área de 7,36 millones de hectáreas de las que un millón no ingresaría al circuito comercial. De todos modos, el buen comportamiento de los cultivos tardíos frente a la sequía que castigó esta campaña augura aún mejores resultados. Una vez más, la gramínea le arrebata la corona a la soja: según la BCBA, con el 50,6% del área recolectada, la cosecha de grano comercial alcanzará los 48 millones de toneladas, mientras que la soja llegará a 43,5 millones de toneladas. Vale decir que el maíz registró un descenso interanual de 3,5 millones de toneladas debido, fundamentalmente, a que perdió 200.000 has en la última campaña. “Esto se explica por los precios, ya que cuando el año pasado el productor estaba tomando la decisión de siembra, sobre todo del tem