“Decorar galletitas es un hobby divertido”
Sus videos en Instagram son hipnóticos. Uno puede pasarse horas viendo su mano delicada que toma con firmeza una manga con glacé y hace trazos sutiles que construyen verdaderas obras de arte. Una mezcla de placer y admiración hace que cualquiera de esos videos supere las 200.000 visitas y que ella ya tenga más de 1,1 millón de seguidores.
Amber Spiegel (@sweetambs) es una de las referentes de esta tendencia global del cookie decorating. “Las redes sociales absolutamente influenciaron en el boom. Es más fácil que nunca crear un tutorial y compartirlo. Yo aliento a la gente a que pruebe, al menos una vez, decorar galletitas. Incluso, si no están interesados en venderlas, termina siendo un hobbie divertido y relajante”, dice a Clarín.
Amber vive en Nueva York. Sus galletitas pueden costar entre 10 y 18 dólares cada una. Ella reconoce que las cookies decoradas no son baratas, pero que la razón está en su enorme trabajo y el de sus colegas (a los que bien define como “artistas”). “Lleva horas y horas completar una docena de galletas”, afirma. La inversión mínima de tiempo es de 15 minutos, pero dice que los trabajos con diseños complejos pueden llevar hasta tres días, considerando la decoración, la realización de la masa y el glacé, mezclar los tonos y rellenar las mangas.
Perdió la cuenta de cuántas galletitas decoró en su vida (dice que en los últimos 10 años le dio vida a las cookies), pero asegura que las más difíciles, sin duda, son los retratos. ¿Cómo aprendió? Estudió pastelería en Nueva York, pero en la escuela “sólo tuve tres semanas de clase de decoración sobre un programa de dos años. Apliqué esas técnicas a las galletitas y pasé horas mejorando mis habilidades. Hoy podés encontrar muchas clases online y presenciales en todo el mundo”, señala. Y a los que quieran inspirarse, además de ver sus tutoriales, recomienda a
decoradoras que admira: @hanielas y @montrealconfections.
Adriana Santagati