Sobre gustos
Una experta internacional habla sobre los cosméticos que hoy tienen más adeptas.
Karin Hannig es vicepresidente Global de Eucerin, de laboratorios Beiersdorf (también dueños de Nivea), la compañía cosmética de origen alemán con más de 130 años en el mercado y 150 filiales en el mundo. Vive en Hamburgo y estuvo de visita en Buenos Aires para compartir experiencias teniendo en cuenta que la línea Hyaluron Filler de Eucerin, es la más vendida en el país en el segmento de dermocosmética (de venta exclusiva en farmacias).
En esta entrevista, habla sobre las preferencias entre las consumidoras de los diferentes países. ¿Cuáles son los avances más significativos en la última década? Diez años atrás, los pacientes iban al dermatólogo para consultar sobre enfermedades de la piel como psoriasis o eczemas. Ahora los pacientes se acercan para mejorar las arrugas, las manchas de la edad, las patas de gallo. Y los médicos además animan a las mujeres con tratamientos cosméticos y no quirúrgicos, y esto se refleja en la demanda. Por eso, nuestro desafío es seguir trabajando en el desarrollo de productos anti-age. ¿En este segmento, qué piden los consumidores? Hoy las mujeres expresan que cuando se levantan tienen un aspecto cansado y la piel opaca. Y hacia allí se dirigen nuestras investigaciones: ofrecer productos que devuelvan la luminosidad al rostro. Por otro lado, tenemos consumidores con pieles muy sensibles, entonces otro de los retos es desarrollar cosméticos libres de fragancias y que huelan bien. Y cada vez recibimos más pedidos, especialmente de América latina, de productos que penetren rápido en la piel y no dejen sensación grasa. En esta zona la piel es un poco más grasosa que en el norte de Europa, por el clima y la humedad en particular. Los consumidores no quieren tener un producto pegajoso en la cara. ¿Qué diferencias ve entre latinos y europeos en los hábitos cosméticos? En Asia y América latina los consumidores demandan más productos que tengan que ver con la luminosidad de la piel. También en esta región las mujeres comienzan a edades más tempranas a cuidarse con productos antiedad. En Alemania, por ejemplo, recién arrancan a los 40 con ese tipo de cuidados, como el uso de productos con ácido hialurónico. Podría decir que en América latina se le da más importancia al cuidado facial mientras que en Europa al corporal. Y, a diferencia de lo que
universales._ sucede en América latina, las europeas prefieren probar todo tipo de cremas antes de aplicarse una inyección. Pero, básicamente, los problemas de la piel son