FLORES GOURMET
Comer rico. Ponerle pétalos a la ensalada puede sonar raro. Pero se practica en muchas culturas. Y ahora es gourmet.
Desde la antigüedad la gente no sólo ama las flores sino que también las usa en sus dietas. Son famosos los dulces de pétalos de rosas que se elaboran, por ejemplo, en Grecia, en México o en Japón. En la Argentina, fue Cristina Ponce Martín quien las introdujo en el mercado. Comenzó hace 25 años, junto a su marido Rubén, en la quinta de Tres Arroyos. Y lo hizo con un refinamiento gourmet.
Ella cultiva las plantas en invernáculos (violetas, pensamientos, clavelinas , etc.) y también en el jardín (lilas, flor del ángel, rosas, aromáticas). Los pétalos son pintorescos y nutritivos: aportan aminoácidos, vitaminas A, B y C, más minerales. Se emplean en ensaladas, carnes, salsas, mer- meladas, vinagres y diferentes tipos de preparaciones para darles un toque de sofisticación y agregar sabores únicos.
“Cultivamos sin productos químicos, luego efectuamos la recolección con delicadeza para no lastimar ni a los pétalos ni a las flores”, dice Cristina. Las flores son de estación y no se enferman, ya que preparan la tierra meticulosamente para hacer la siembra. “Las flores son como las personas: si comen sano, mejoran la salud”, señala.
Las flores se cosechan a las 5 de la mañana, cuando el sol despunta. Pero ojo: no todas son comestibles. “Es preciso saber antes de consumirlas. Las de tomate, por ejemplo, son tóxicas”, advierte.