SE ACERCA EL 5 G, LENTAMENTE...
Mientras que los lectores más grandes recordarán cuando los mensajes de textos o SMS eran la manera más novedosa de comunicarse con alguien, y otros vivieron el desembarco del 3G, todos recordamos cuando se lanzó el 4G aquí hace poco. Si bien las promesas de ultra velocidad no se cumplieron de manera sostenida en todo el país –ya que la conectividad de nuestras redes es una de las grandes falencias a las que nos enfrentamos no sólo en Argentina, sino en toda América Latina– ya estamos acostumbrados a la idea de poder recibir y transmitir datos con tal rapidez que permite, por ejemplo, que veamos series por streaming sin necesidad de estar conectados a WiFi. En el resto del mundo ya se implementa el siguiente paso, las redes 5G, que habilitan no sólo más velocidad sino también mayor agilidad para asumir el siguiente reto: la conexión de más objetos a Internet, como autos y edificios; la aparición de aplicaciones más demandantes y la mudanza casi completa de datos a la nube. Aunque está en sus primeras fases, compañías como Intel y creadores de teléfonos como Huawei, Samsung y Motorola están liderando la popularización de esta tecnología en las principales ciudades, cuya adopción debería ser más rápida que la de generaciones previas. Vivir en un mundo 5G permitirá sacar provecho completo de las posibilidades de una conectividad que verdaderamente enriquezca nuestra vida cotidiana y potencie los límites de nuestro trabajo y nuestra vida personal.