Cómo comer con US$ 0,80 por día
Seis pesos por día. Según el gobierno argentino, esa cifra alcanza para comer. Sin embargo, en las calles de la capital, los seis pesos (US$ 0,80 al cambio del dólar en Uruguay o en el mercado informal de Argentina) no alcanzan para más de un paquete de chicles, un frasco de yogurt o un simple alfajor, que apenas llegan a satisfacer aquello que el gobierno denomina “requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindi- bles” para un adulto. Mientras el Fondo Monetario Internacional analiza sancionar a Argentina por emitir datos inflacionarios imprecisos, la agencia The Associated Press revisó precios en Buenos Aires y no pudo hallar una lata de gaseosa por menos de 8 pesos. Incluso un sandwich de jamón y queso —sin lechuga ni tomate— costaba 13 pesos en un negocio céntrico. La tasa oficial de inflación se basa en gran parte en lo que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) indica que es el costo total de 27 productos de la canasta básica, que mide el mínimo que una persona extremadamente pobre necesita consumir. El dato más reciente indica que la canasta básica mensual de alimentos de una familia de cuatro miembros costó $ 719,07 pesos en diciembre, lo que equivale a 5,8 pesos por día, por persona. Otra cifra polémica: el INDEC anunció que la inflación fue de sólo 10,8 % en 2012, aunque economistas privados calcularon que se ubicó en 26 %, la peor en América Latina. Los bajos números de la inflación oficial han permitido al gobierno controlar la suba de salarios y los precios al consumidor, así como enmascarar el verdadero tamaño del crecimiento económico y reducir el pago de bonos externos atados a la inflación.