Por subsidios y pagos de la deuda, se duplicó el déficit fiscal en enero
Llegó a 3.052 millones de pesos. El desequilibrio creció pese a que los ingresos aumentaron varios puntos por encima de la inflación.
Las cuentas públicas arrancaron en enero con un déficit de $ 3.052 millones.
Es un 92,8% más de los $ 1.583 millones de igual mes de 2013, de acuerdo a las cifras difundidas ayer por el Ministerio de Economía que aún no reflejan el impacto de la reciente devaluación del peso.
Si se descuentan las transferencias de los intereses de la ANSeS, el rojo trepa a $ 6.057 millones, cuadruplicando los números del año pasado. Y si se excluyen tanto los ingresos como los pagos de la Seguridad Social, y se considera solo los números del Tesoro Nacional el déficit suma $ 12.506 millones, un 100% más.
Este mayor desequilibrio se debió fundamentalmente a las mayores compensaciones y subsidios por Energía y Transporte, al mayor déficit de las empresas publicas y a los mayores pagos por intereses de la deuda.
Esos números negativos se destacan aún más porque los ingresos por la recaudación de impuestos y aportes a la Seguridad crecieron un 37,9%, varios puntos por encima de la inflación, fundamentalmente por la buena performance del IVA ( 42,3%) y de Ganancias (+ 46,9%). Sin embargo, el déficit casi se duplicó.
Es que los gastos totales subieron un 45%, liderados por los subsidios económicos (+ 60%), los intereses de la deuda (+ 60%) y el déficit de las empresas públicas (+ 634% o $ 1.400 millones más).
Tanto los sueldos como las prestaciones de la seguridad social aumentaron un 34 % anual y los gastos de capital un 35,5%.
Sin embargo, el gasto promedio subió al 45% porque, según el Ministerio de Economía, “se destacaron además los gastos realizados en calidad de Transferencias Corrientes a personas y a empresas privadas cuya expansión fue del 73,1% anual. Dentro de esta partida se destacan la Asignación Universal por Hijo y las demás asignaciones familiares, las diversas prestaciones administradas por el PAMI, así como también las compensaciones, subsidios y estímulos a la producción de los programas asociados a Energía y Transporte”.
En base a estos números, y al déficit récord registrado durante 2013, con la reciente devaluación y la mayor inflación, el objetivo oficial es licuar el gasto, en especial de sueldos y jubilaciones.
Es que la mayor inf lación asegura distintas velocidades entre ingresos y erogaciones. Por ejemplo, el Gobierno busca que las paritarias se firmen por debajo de la inflación esperada, mientras la suba del 11,31% de las jubilaciones y pensiones –que regirá entre marzo y septiembre próximos— quedará licuada o absorbida por la inflación del primer trimestre.
La agenda oficial se complementa con una suba de las tarifas de servicios públicos, como anunció el Ministro Axel Kicillof.