La baja duró poco: el dólar blue rebotó y volvió a los $ 11
Los ahorristas aprovecharon la caída para comprar y la mayor demanda empujó el precio.
El dólar paralelo rebotó ayer y subió 50 centavos, hasta $ 11. Las compras de oportunistas tras el desplome del miércoles impulsaron nuevamente la cotización en las cuevas. Así el billete retomó su camino alcista y la brecha con el oficial, que bajó medio centavo, a $ 7,885, volvió a ampliarse. El Banco Central salió ayer a comprar divisas: se hizo de US$ 20 millones y las reservas ascendieron a US$ 27.668 millones.
El miércoles el blue se había desplomado unos 65 centavos a $ 10,55, diez centavos por debajo del “dólar tarjeta”. Esto impulsó la demanda ayer en las cuevas de muchos ahorristas que mantienen la expectativa de devaluación y por eso encontraron oportuno el precio del billete. Esa demanda colocó al dólar informal nuevamente por encima del tipo de cambio que surge de compras con tarjeta en el exterior, que ayer terminó en $10,645.
“Se había pinchado demasiado. Al ser un mercado tan chico, unas pocas operaciones lo hacen caer en forma estrepitosa y en poco tiempo lo pueden hacer subir fuertemente”, explica un vendedor. En las cuevas reconocieron ayer mayor demanda de compradores.
Mientras tanto, en la plaza oficial, el billete cayó medio centavo a $ 7,885. Los exportadores siguieron liquidando divisas, para un mercado fuertemente regulado por el Banco Central. Con
escasas compras habilitadas a los importadores, los US$ 140 millones que ingresaron ayer amagaban con profundizar la baja del tipo de cambio. Por eso, el Central aprovechó para comprar e impidió una baja mayor.
Así las reservas subieron US$ 3 millones, a US$ 27.668 millones. Entre enero y febrero, la entidad que comanda Juan Carlos Fábrega perdió el 10% de los dólares de sus
arcas. Fueron US$ 3.053 millones que se esfumaron en lo que fue la
peor caída para un primer bimestre desde septiembre de 2006, cuando el Gobierno las usó para cancelar la deuda con el FMI.
Fábrega viene hasta ahora cumpliendo a rajatabla los pedidos oficiales: contuvo la corrida hacia el blue, devaluó más del 20% en enero, quitó presión sobre la cotización del billete oficial al lanzar una medida que limitó la cantidad de dólares que podían tener los bancos, subió las tasas y cerró el acuerdo con cerealeras para que liquiden sus dólares y con tasas atractivas compren contratos a futuro. Pero el titular del Central espera ahora que Kicillof haga lo suyo y presente el plan que corrija la actual política fiscal. Si no se corrige el gasto, en el mercado sostienen que el equilibrio que hoy vive el mercado cambiario durará poco.