Cristina exaltó al ministro y criticó la propuesta de los banqueros
Habló por cadena nacional y disparó que el plan de ADEBA era un arreglo “con recursos de los argentinos”.
En su primer y muy esperado discurso tras el fracaso de las negociaciones con los fondos buitre en Nueva York, Cristina Kirchner volvió a negar que la Argentina haya caído en default y le dio un claro respaldo a Axel Kicillof. También quedó claro que la Presidenta estuvo detrás de las lapidarias críticas del ministro al plan de los banqueros privados para supuestamente comprarle la deuda a los holdouts: “Hacerlo con los recursos de los argentinos, así cualquiera es generoso”, ironizó Cristina, en sintonía con Kicillof. Y aludió sin nombrarlo al banquero Jorge Brito, protagonista de la movida para negociar con los buitres: “Para ser San Martín no alcanza solamente con que te pongan en un diario como salvador de la Patria”, disparó.
La Presidenta habló 53 minutos por cadena nacional. “Es 31 de julio y el mundo sigue andando”, arrancó, buscando desdramatizar que se pasó la fecha límite y los bonistas reestructurados no cobraron. Saliendo al cruce de cuestionamientos de la oposición, afirmó que “no pensamos en el Gobierno y que reviente el que viene. Pensamos en el país”. Para ahuyentar la idea de una mala gestión del Gobierno, involucró a Mauricio Macri, quien en la audiencia secreta que mantuvieron en Olivos semanas atrás, le dijo que con US$ 1.500 millones como primer pago el Club de París aceptaría un acuerdo, pero que su Gobierno lo cerró “con menos de la mitad”. La Presidenta también se ufanó de que la millonaria indemnización concedida a Repsol por YPF se arregló “por la mitad” de los US$ 10 mil millones que la petrolera reclamaba en el CIADI.
La Presidenta fue crítica con el mediador Daniel Pollack y con el juez Thomas Griesa, cuya sentencia calificó de “casi usuraria”. “El default selectivo no existe, no figura como causa la imposibilidad de cobrar. Van a tener que inventar otra palabra”, insistió.
En un Salón de las Mujeres colmado, aludió a los bombardeos israelíes contra Gaza y aseguró que “ésto (la crisis de la deuda) también es violento. Nos mandaron misiles financieros”, lo que explicó en que “si volvemos a ser un país viable es que nos quieren tumbar”.
“Yo no quiero pasar a la historia como Bernardino Rivadavia (por el empréstito con la banca Baring), como el megacanje y el blindaje”, dijo. El tono épico incluyó una extensa cita de Néstor Kirchner de febrero de 2004, antes de la reestructuración, en que afirmaba que si se pagaba más del 25% “será con el hambre del pueblo”, leyó conmovida.
En el Salón de las Mujeres los funcionarios corearon “¡ Patria sí, colonia no!”. Hubo pocos empresarios, y la presencia gremial fue acotada. Llamó la atención la ausencia del titular de la CGT Balcarce, Antonio Caló.