Domínguez se reunió con el papa Francisco
Julián Dominguez, de 50 años, que quiere ser el sucesor de Cristina Fernandez de Kirchner, fue invitado ayer a la misa de las 7 en la capilla de la Casa de Santa Marta, donde aloja el Papa y tiene su principal cuartel general en el Vaticano. Domínguez tuvo un breve aparte con Francisco en los saludos que el Papa argentino hace personalmente a los que concurren a la liturgia cotidiana. A Clarín, el presidente de la Cámara de Diputados, dijo que “represento a la presidenta en la ceremonia de consigna de las cartas credenciales que hará mañana (por hoy) el nuevo em- bajador Eduardo Valdes”.
Domínguez, que es amigo de Bergoglio, a quien ha visto “cinco o seis veces” desde que el cardenal de Buenos Aires fue elegido pontífice, elogió el acuerdo de Cuba y Estados Unidos “con la fundamental mediación del Papa” y destacó que “en América Latina se va fortaleciendo una línea social cristiana”.
Domínguez sintoniza ampliamente con el Papa “en la necesidad de la identidad del proyecto del futuro gobierno, al cambio del neoliberalismo por una visión humanitaria y social”, en la que influirá la palabra del Papa. “Pero Francisco no influirá en la elección del presidente”, acotó.
El nombre del presidente de la Cámara de Diputados figura entre los principales en la línea de afectos políticos de Francisco, aunque el Papa argentino mantendrá “in pectoris” a sus preferidos, sin dar nombres. Ayer, también Daniel Scioli cantó presente ante Jorge Bergoglio aprovechando el saludo de Navidad. En la misiva, Scioli, que aspira a recibir el apoyo de la presidenta Fernandez de Kirchner como Domínguez expresó en la misiva su “admiración de siempre” a Francisco y le dijo que sus palabras son “una sana guía” para las decisiones de gobierno.
En la misa estaban también María José, Alejandro y Mariano, acompañados por sus parejas, los tres hijos de la abogada Alicia Oliveira, recientemente fallecida, a quienes el Papa invitó a visitarlo. Francisco era un buen amigo de Oliveira, la “abogada que más habeas corpus presentó durante la dictadura y que recibió una ayuda decisiva del cardenal Bergoglio para salvar a un buen número de perseguidos”, dijo a Clarín el nuevo embajador Eduardo Valdés.