“No pude salvarlos... a algunos les habían disparado en la cabeza”
Patrick Pelloux, a la vez médico y cronista de Charlie Hebdo, llegó al periódico unos minutos después del ataque que diezmó su redacción. Ayer, con la la voz quebrada, dio un desgarrador testimonio del drama: “No pude salvarlos”, dice llorando a sus colegas muertos. “A algunos ya no había nada que hacer porque les dispararon en la cabeza”.
Excepcionalmente, Pelloux no participaba en la conferencia de redacción del semanario. Presidente de la Asociación de Médicos de urgencias de Francia, había asistido a la misma hora a una reunión sobre coordinación con los bomberos.
“Estaba en esa reunión cuando Jean–Luc, el grafista (de Charlie Hebdo), me llamó y me dijo: ‘tienes que venir rápidamente, nos dispararon con (fusiles) Kalachnikovs”, contó. “Creí que era una broma... pero no lo era. Cuando llegué, fue espantoso”, dijo sollozando. El ataque dejó doce muertos, entre ellos ocho periodistas y dos policías, y 11 heridos.
“Llegamos tres minutos después” con un coronel de los bomberos de París, “Y mientras nos hacíamos cargo de las víctimas, ellos (los asesinos) seguían matando gente en la calle...”, comentó.
En cuanto a Charb, director de la revista, muerto junto a los dibujantes Cabú y Wolinski, declaró: “Creo que debió levantarse y tratarlos de imbéciles o hacerles un corte de manga, o tratar de quitarles las armas. En la posición en la que murió, estaba enredado en la silla, es como si hubiera sido asesinado cuando se estaba levantando. Yo lo conozco bien, era mi hermano, y sé que debió hacerles eso...”.