Temen que el ISIS arrase Palmira, Patrimonio de la Humanidad
Estado Islámico tomó esa histórica ciudad siria. La Unesco advierte que su destrucción será un “crimen de guerra”.
La caída de la ciudad siria de Palmira en manos del Estado Islámico (ISIS) causó alarma y preocupación en la comunidad internacional, que reclamó proteger a la población y a este célebre sitio histórico de 2.000 años de antigüedad, declarado Patrimonio de la Humanidad.
El grupo yihadista se apoderó el jueves de la totalidad de la antigua ciudad, ubicada a 200 km de Damasco, tras arrasar con las tropas del régimen de Bashar al Assad que había en la zona. Se teme que los fundamentalistas demuelan las estatuas y reliquias que hay en esta joya arqueológica de Medio Oriente, tal como hicieron con los bienes culturales de otras ciudades conquistadas en la vecina Irak, entre ellas Mosul, Nínive y Hatra.
Palmira no sólo está en peligro por la barbarie de los yihadistas, sino también por los bombardeos indiscriminados de las fuerza aérea siria. “Los combatientes del ISIS están en todos lados en Palmira, también junto al sitio arqueológico ubicado en el suroeste de la ciu-
En peligro. Una vista de las ruinas de Palmira, un sitio histórico de más de 2.000 años de antigüedad. dad”, explicó Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
La Unesco sigue con preocupación la situación. “Todo lo que sucede hoy en Palmira es muy peligroso. Sabemos que hubo destrucciones, hay columnas que caye- ron. Hubo un bombardeo”, dijo la directora general de Unesco, Irina Bokova. “Estoy inquieta porque lamentablemente hemos visto antes la destrucción de sitios del patrimonio mundial, sitios de excepcional valor universal en Nimrud y Hatra. Hemos visto el saqueo del museo de Mosul. Palmira es una joya, la ‘Venecia de arena’, como dicen los expertos. Estamos muy preocupados por las acciones militares y por una eventual destrucción de este sitio magnífico”, señaló.
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, también se alarmó por la situación y advirtió que puede constituir un “crimen de guerra”. “Las matanzas y la destrucción deliberada del patrimonio arqueológico y cultural en Siria e Irak por Daesh (nombre en árabe del ISIS) pueden constituir un crimen de guerra según los término del estatuto de Roma”, subrayó.
Según Mogherini el bloque europeo ya “tomó todas las medidas apropiadas” para evitar el “tráfico ilegal de bienes culturales que contribuyen directamente en el financiamiento de Estado Islámico y otras organizaciones terroristas”.
La batalla por Palmira no duró demasiado. La débil resistencia del ejército sirio facilitó el ingreso de los yihadistas. Los combatientes de Estado Islámico también tuvieron la ayuda de sectores sunnitas, especialmente de beduinos, enemigos del régimen de Assad.
Desde que tomaron Palmira los fundamentalistas del ISIS aplicaron sus drásticas y sanguinarias leyes, para sembrar el terror. Los terroristas celebraron la conquista de la ciudad publicando en Internet fotos y videos donde muestran la decapitación de soldados y simpatizantes de régimen sirio.
Las imágenes dejan ver cuerpos tirados, sin cabeza, en un baño de sangre. También cabezas apoyadas en el suelo y cerca de allí documentos de identidad de las víctimas bajo la leyenda: “Apóstatas muertos en Palmira”. Varias cuentas de redes sociales de yihadistas divulgaron las imágenes anunciando “la liberación de la Wilaya de Homs”, usando el término islámico para indicar la región dentro del “califato” que instalaron allí.
La ciudad de Palmira es estratégica para el ISIS porque está situada en el gran desierto sirio, limítrofe con la provincia de Al Anbar en Irak, que los yihadistas controlan en gran parte. Hace cuatro días había caído en sus manos la ciudad iraquí de Ramadi. Muchos consideran que esto ocurre ante el fracaso de la estrategia militar estadounidense en la región. El presidente estadounidense, Barack Obama, admitió que se trata de “un revés táctico”, pero insistió en que no se está perdiendo la guerra contra los yihadistas.