Encontraron las esculturas preferidas de Adolf Hitler
Son caballos que esculpió Josef Thorak, un artista oficial del nazismo. Los ofrecían en el mercado negro.
La escultura favorita de Adolf Hitler reapareció, después de 26 años. Se trata de dos caballos en tamaño real realizados por Josef Thorak (18891952, considerado un bastión del espíritu nacionalsocialista), que estaban escondidos, entre otras obras, en un depósito de Bad Dürkheim en Renania Palatinado, al suroeste de Alemania. En los últimos años, habían sido ofrecidos en el mercado negro por hasta cuatro millones de euros. Según fuentes policiales, no hay dudas de que son los caballos auténticos.
Los caballos de Thorak, encontrados en muy mal estado de conservación, habían sido dados por perdidos tras la caída del Muro de Berlín en 1989. Las piezas, diseñadas para ser contempladas desde el despacho de Hitler en la Cancillería –sede del gobierno alemán– atravesaron un largo periplo que las llevó desde un taller de arte a 20 kilómetros de Berlín (donde Hitler había ordenado ponerlas a salvo, en 1943), hasta la antigua Alemania Oriental, adonde fueron llevadas en secreto por el Ejército Rojo.
Desde 1950, la escultura decoró un campo de deportes del ejército soviético en Eberswalde, una localidad cercana a Berlín. Durante esos años, las autoridades sólo permitían visitarla a estudiosos del arte y periodistas con un permiso especial, pero no podía ser fotografiada. Hasta que, en 1989, un artículo sobre las esculturas en el diario Frankfurter Allgemeine publicado por la historiadora de arte Magdalena Busshart alertó sobre el valor de las piezas. Semanas después, la obra había desaparecido.
En el contexto caótico de la caída del Muro, la desaparición de las obras pasó casi inadvertida y aún no se sabe con exactitud cómo llegaron los caballos al depósito de Bad Dürkheim. Las hipótesis son muchas y van desde su traslado a Moscú hasta la venta de las esculturas por parte del régimen comunista para obtener divisas.
Durante todo este tiempo, los caballos fueron ofrecidos reiteradas veces en el mercado negro. Dos años atrás, le llegó una oferta a la historiadora Busshart por 1,5 millones de euros. La oferta venía de parte de un hombre que se declaró cercano a Schalck-Golodkowski, un famoso vendedor de las piezas de arte de los museos de la Alemania Oriental al exterior. La historiadora alertó a las autoridades.
El pasado diciembre, una familia alemana quiso vender nuevamente los caballos de Thorak a través del asesor de arte Arthur Brand, quien también dio aviso a la policía germana. Tras una larga investigación, los detenidos son ocho personas de entre 64 y 79 años, todas de nacionalidad alemana.