Clarín

Los Leones, la Peque y ese manojo de sueños

- TORONTO, CANADA. ENV. ESPECIAL Adrián Michelena amichelena@clarin.com

Cuando el comandante de abordo pronunció en un esmerado castellano “bienvenido­s a ‘Torontou’”, no se escucharon aplausos, ni gritos, como suele ocurrir en viajes de paseo. Y claro, en este caso, aquí nadie vino de vacaciones. De hecho, los primeros en bajar del vuelo AC093 de Air Canadá fueron los Leones del hockey, que van por la medalla de oro, por más que nadie lo afirme de tal manera. Fue un vuelo extenuante para los deportista­s (y los demás pasajeros), de 13 horas, con una escala en Santiago de Chile para recargar combustibl­e.

“Me traje una batería de películas porque esto es matador, pero viajo desde los 14 años en avión, estoy acostumbra­do”, comentó el tenista Guido Andreozzi, que se esforzó para acomodar sus piernas en un avión tan estrecho. Sí él viajó apretado, ni que hablar de los chicos del rugby Seven, que parecían contorsion­istas para acomodar sus extremidad­es en las butacas. Las chicas del fútbol y Paula Pareto se mostraron más cómodas. “Estoy tranquila pero ansiosa, no te digo que le estoy pegando patadas a la pared, pero ya quiero pelear, quiero la medalla, no veo la hora de que llegue el sábado 11”, le dijo la Peque a este diario. Ninguno de ellos vino como turista a Toronto. Es más, de repente desapareci­ó el plantel completo de hockey masculino. ¿Dónde estaban los Leones? Ya se habían subido a otro vuelo rumbo a Boston: su entrenador, “El Chapa” Retegui, los quiere diez puntos para el debut de modo que prefirió antes de los Juegos armar un amistoso con Estados Unidos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina